Por Ana Maria Echeverría
Viena/AFP
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) decidió el miércoles en Viena mantener su oferta de crudo sin cambios, search pese al alza de la demanda y problemas en varios países del cártel, como Libia, Irak e Irán.
Esta decisión de conservar el tope de producción de 30 millones de barriles diarios (mbd), fijado a fines de 2011, se explica por la «estabilidad del mercado» y los «buenos precios» del barril, afirmó el influyente ministro de Petróleo y Minas de Venezuela, Rafael Ramírez.
El barril se ha mantenido desde hace más de tres años por encima de los cien dólares, una cotización que satisface a los 12 ministros del cártel, y que podría incluso subir a causa de la prevista alza de la demanda, que ha llevado a la Agencia Internacional de Energía (AIE) a llamar a la OPEP a aumentar su oferta a 30,7 mbd en el segundo semestre del 2014.
«¿Cuántas veces debo decirles que estoy satisfecho con los precios del crudo?», lanzó a reporteros el ministro de Arabia Saudita, Ali Naimi, al término de la 165ª reunión ministerial de la organización.
La OPEP, que suministra uno de cada tres barriles de crudo consumidos diariamente en el planeta, volverá a reunirse el 27 de noviembre en Viena, para examinar la evolución de los precios del crudo, indicaron varios ministros a la salida de la cita celebrada en la sede del cártel en la capital austriaca.
OPEP atenta a Libia, Irán, Irak
Aunque el mercado no da señales de la volatilidad que lo caracterizó a principios de la década – a causa de tensiones geoestratégicas, tras la guerra encabezada por Estados Unidos contra Irak – esa situación podría cambiar si, por ejemplo, Libia, cuya producción está por los suelos, se recupera, o si Irán, una potencia petrolera, regresa al mercado, señalan analistas.
«La situación en Libia será uno de las mayores preocupaciones para la OPEP en los próximos meses», así como el problema «de cómo enfrentar el alza de la demanda», opinó el analista Thomas Pugh, de la firma londinense Capital Economics.
En experto señaló también que un alza de la oferta de crudo iraní podría crear tensiones en el seno del grupo y empujar los precios a la baja.
El ministro de Petróleo iraní, Bijan Zanganeh, anunció en Viena que, tras el fin de las sanciones impuestas contra Teherán a causa de su programa nuclear – que Occidente sospecha tiene fines bélicos -, su país podría producir 4 mbd «en menos de tres meses».
Si las negociaciones en curso entre Teherán y las grandes potencias tienen éxito, Irán se convertiría así en el segundo productor de la OPEP, lugar que ahora ocupa Irak, su rival histórico, que produce unos 2,7 mbd.
Falta también por ver si los ataques de jiyadistas en Irak, que se acaban de tomar la segunda ciudad del país, Mosul, en el norte, afectan o no la producción iraquí, y por ende, el mercado petrolero.
«La producción petrolera no está afectada», aseguró el miércoles en Viena el ministro iraquí de Petróleo, Abdul Kareem Luaibi Bahed, que destacó que «la mayor parte de la producción» no está en el norte sino en el sur del país.
Otro tema que examinó la OPEP en su reunión en Viena, y cuyo debate decidió posponer, fue la inesperada candidatura de una mujer – la ministra de Nigeria, Diezani Alison Madueke – al cargo de secretaria general de la OPEP.
Esta es la primera vez que una mujer aspira al puesto ejecutivo de la organización petrolera.
La organización petrolera se las arregló para aplazar ese debate para su próxima reunión, en noviembre, al decidir mantener al libio Abdalla El Badri, cuyo mandato expiraba en diciembre, hasta fines de junio del año próximo.
«Los ministros decidieron extender mi mandato hasta el 30 de junio del 2015», afirmó en una rueda de prensa El Badri.
El miércoles, los precios del petróleo registraban una ligera subida en Asia. El referente estadounidense, el West Texas Intermediate (WTI o «sweet light crude»), para entrega en julio, ganaba 4 centavos a 104,39 dólares el barril, mientras que el crudo Brent del Mar del Norte, también para suministro en julio, subía 9 centavos, a 109,61 dólares.
«El mercado está bien abastecido, y todo el mundo está contento», resumió el secretario general de la OPEP.