Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
Celebrar este fin de año al lado de la familia en sana convivencia siempre es lo ideal para millones de salvadoreños que festejan el cierre de un año atípico y el inicio de un nuevo año que se espera sea mejor.
Los hogares salvadoreños se pintan de luces y colores junto a los movimientos típicos de las madres afligidas por sacar la cena de fin de año a tiempo. Como ya es una costumbre y tradición, este 31 de diciembre se celebra el cierre de un año con buena cumbia de Aniceto Molina, con 2 panes con pollo en un plato grande y un vaso de gaseosa bien helada para asentar los alimentos. Lo anterior es el menú promedio que hacen los salvadoreños en este día, aunque miles, suelen cambiar el platillo por carne asada, pollo con diferente preparación, tacos de pollo y res, así como una cena típica de un día común.
Desde las 4 de la tarde Estefany Menjívar ayuda a preparar los ricos panes con pollo, típicos de las festividades y del plato salvadoreño, también dijo que pasarán el fin de año en familia para convivir y pasar un rato ameno.
Aunque muchos cambian la idea de los panes con pollo por otros alimentos que, de igual forma, son exquisitos; como es el caso de la familia de Ana Rivas quien aseguró que hará carne asada para este día; dichos alimentos los empieza a preparar desde las 8 de la noche para que toda la familia pueda disfrutarlo durante la festividad.
El pollo no puede faltar en el plato de los salvadoreños, pero ese plato se puede preparar de diferentes formas, una de ellas es asado, así lo hará Allison Gómez, una madre de familia que comentó que hará los preparativos a partir de las 6 de la tarde de este día, con la poca familia que “está en casa”, ya que por la pandemia no se van a arriesgar a estar aglomerados en el mismo hogar.
Asimismo, aprovechó el espacio para hacer un llamado que en caso de reunirse siempre deben de tomar las medidas de bioseguridad para no contraer el virus.
Sin embargo, muchas familias siempre dan gracias a Dios por el año que finalizan con vida, y más aún cuando se tiene una pandemia encima; como es el caso de Verónica Marlene Castro, de 48 años de edad: “Primeramente iremos al culto a dar gracias a Dios porque hasta esta fecha nos tiene con vida; segundo, será compartir solamente con el núcleo familiar por la pandemia”, quien agregó que no tienen nada preparado para este día, ya que no lo celebrarán por los miles de médicos, enfermeros y personal de ordenanza que están en los hospitales, luchando en primera línea con el virus, así como los cientos de infectados.
Y es que, miles de salvadoreños que trabajan en primera línea, no van a poder disfrutar de los alimentos y recibir el año nuevo en familia como les gustaría, ya que por su trabajo no se los permite. “El 31 de diciembre es una fecha especial donde las familias se reúne, conviven y reciben el año nuevo todos juntos, en cambio, en nuestro caso será diferente, vamos a tener que recibirlo sin la familia y vamos a extrañar estar con ellos”, manifestaron agentes de la Policía Nacional Civil que esta redacción consultó cuando brindaban seguridad a los capitalinos. Los uniformados eran agentes policiales del 911 que se les preguntó sobre cómo iban a pasar el fin de año; ellos sin ningún tipo de desmotivación respondieron que atenderán las emergencias de la ciudadanía que hace en noche de fin de año.
No todo es color de rosa en los hogares salvadoreños, ya que cientos de emprendedores que se vieron directamente afectados económicamente por la pandemia del coronavirus se han limitado a hacer gastos que puedan perjudicar su inició de año. A este contexto, Yorleny Martínez, de 28 años de edad, relató que cree que no va tener algo que cocinar en este 31 de diciembre “estamos completamente enjaranados”, así también ejemplificó que muchos salvadoreños sí van a poder pagar su carne asada o pollo asado, pero ella por sus ingresos como emprendedora del sector informal no puede darse esos lujos.
“Las personas del sector informal perdieron lo poquito que tenían, ahora va a tocar ver si se puede conseguir un dólar para hacer un huevito estrellado con tortilla y frijoles”, comentó Yorleny. Añadió también que a miles de salvadoreños emprendedores que se vieron afectados por la pandemia “les va tocar que un amigo se solidarice y los invite a comer”.
En esta época de fin de año, miles de salvadoreños también no suelen tener una festividad de la mejor manera, ya que por los problemas que pasan día a día, estas fechas las ven como gastos, y más cuando está pandemia dejó en la quiebra a muchos. Por lo que siempre será una opción, ser solidario con los demás.