Josefina Pineda de Márquez
Maestra normalista
Lo mejor de esta regla es que no tiene excepciones.
•Soy muy feliz.
•Somos muy felices.
•Tengo una nariz muy grande.
•– Mis compañeros de escuela me decían NARIZOTA.
•–¿Y ustedes? Decía yo, shop apenas respiran naricillas… naricitas.
Hay bastantes palabras que llevan la Z y al pasarlas al plural, o a aumentativos y diminutivos el sonido es el mismo de la Z pero habrá que escribir C: Capaz- capaces. Audaz- audaces. Raíz- raíces.
También la Z va en medio en algunas palabras e igual, cambian la Z por C cuando la siguen las vocales: e – i.
•Mi padre iba a cazar y al regresar decía a mi mamá: Mira cacé un tacuazín.
•Mi abuela me enseñó a rezar y recé el rosario con ella.
El doctor Alfredo Huertas García, nuestro maestro en la Escuela Normal Superior, nos decía que en su país, España, no tenían mayor dificultad porque el sonido de la Z y la C seguida de la i – e lo pronuncian LINGUODENTAL (lengua y dientes superiores y soplo) y al escribirlo no era problema. En cambio aquí en América nuestros abuelitos nahoas, pipiles, mayas pronunciaron tales sonidos SESEANTES o sea con predominio de la S. ¡Bien! Por nuestros ancestros indígenas.
En nuestra América lo mismo decimos TAZA que TASA. Pero debemos escribirlas correctamente con S o Z de acuerdo al significado.
Otra regla para el uso de la Z: Los aumentativos terminados en EZA Y AZO que denoten golpe y diminutivos terminados en ZUELA (O).
•El hombrazo asustó al presentarse en la Asamblea.
•En una barcaza, mis amigos y yo, atravesamos el lago de Ilopango.
•El energúmeno dando un golpazo en la mesa se retiró de la sesión.
•¡El imberbe le dijo escritorzuela a mi maestra!
•En España dicen mozuelo a los muchachos (aquí, cipotes).
Con la S se escriben: 1º Las voces terminadas en SIÓN derivados de adjetivos que acaben en SO. Preciso- precisión. Conciso- concisión. Extenso- extensión. Difuso-difusión.
•Es preciso, querido Carlos, que hables con precisión.
•Extensión viene de extenso.
De mi maestro doctor Alfredo Huerta García. Escritor y profesor de Legua y Literatura españolas.
…
El pueblo más rico es aquel a quien sus gobiernos dotan de bibliotecas públicas más numerosas, a quien se le facilitan los medios de leer mucho y bueno, sin desembolsos considerables.
Hasta pronto.