París / AFP
Olivier Thibault / Jean-Philippe Chognot
Antes del nuevo coronavirus, varias grandes epidemias se manifestaron a comienzos del siglo XXI pero, pese al pánico desencadenado por esas nuevas enfermedades, han sido claramente menos mortíferas que las grandes pandemias gripales del siglo XX.
La epidemia actual deja por ahora 259 muertos en China y unos 12.000 casos confirmados.
– Las epidemias más conocidas del siglo XXI –
– 2013-2016: Ébola en África occidental
Balance: 11.300 muertos
Identificado por primera vez en 1976, este virus desencadenó, entre fines de 2013 y 2016, una epidemia de fiebre hemorrágica en Guinea, Sierra Leona y Liberia. Menos contagiosa que otras enfermedades virales, el ébola es temible a causa de una tasa de mortandad muy elevada (de alrededor del 40%).
El virus reapareció en agosto de 2018 en el este de la República Democrática del Congo, donde ha causado más de 2.200 muertos.
– 2009-2010: gripe A(H1N1)
Balance: 18.500 muertos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Pero la revista médica The Lancet calcula el número de muertos entre 151.700 y 575.400.
Aparecida en México a fines de marzo de 2009, es llamada inicialmente gripe «porcina» por la OMS. La alerta pandémica es lanzada el 11 de junio de 2009, pero este virus A(H1N1) termina siendo menos mortífero de lo esperado.
Se organizaron campañas masivas de vacunación con urgencia. Después, los países occidentales, en particular europeos, y la OMS fueron criticadas por realizar una movilización considerada sobredimensionada, cuando cada año la gripe de temporada causa entre 250.000 y 500.000 muertos, según la OMS.
– 2002-2003: SRAS
Balance: 774 muertos
El Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS) emerge a fines de 2002 en el sur de China, transmitido por el murciélago al hombre a través de la civeta, mamífero salvaje vendido vivo en mercados chinos por su carne. Se muestra muy contagioso, provocando neumonías agudas a veces mortales.
A partir de la primavera de 2003, provocó pánico en Asia. El SRAS afectó a unos 30 países, pero con un balance muy limitado. China continental y Hong Kong concentraron el 80% de las víctimas, y tuvo una tasa de mortalidad del 9,5%
– 2003-2004 : gripe aviar
Balance: 400 muertos
Causando pánico mundial, la gripe aviar devastó los criaderos de pollo de Hong Kong antes de transmitirse al humano. La OMS decreta «una urgencia de salud pública de alcance mundial», pero el balance fue limitado.
– Las grandes pandemias en siglo XX –
– De 1981 a nuestros días: sida
Balance: 32 millones de muertos, según la Onusida
En 2018, unas 770.000 personas murieron de enfermedades relacionadas con el VIH, que afecta el sistema inmunitario y vuelve vulnerables a los pacientes a las infecciones oportunistas.
Pero hoy 24,5 millones de personas tienen acceso a tratamientos antirretrovirales que, cuando se toman de manera regular, bloquean muy eficazmente la enfermedad y reducen los riesgos de contaminación.
– 1968-1970: gripe de Hong Kong
Balance: un millón de muertos (cifra citada por el organismo estadounidense de vigilancia y prevención de enfermedades CDC).
Dio la vuelta al mundo entre el verano de 1968 y la primavera de 1970, matando a muchos niños. Proveniente de Hong Kong, el virus atravesó primero Asia y luego, a fines de 1968, Estados Unidos. Luego de algunos meses, el virus llegó a Europa a fines de 1969.
Para los epidemiólogos, esta gripe entró en la historia como la primera pandemia de la era moderna, la de los transportes aéreos rápidos.
– 1957-1958: gripe asiática
Balance: 1,1 millones de muertos (CDC)
Esta pandemia tuvo dos olas virulentas. El virus apareció antes en una provincia meridional de China en febrero de 1957. Se requirieron varios meses antes de llegar a América y Europa. Los ancianos fueron las primeras víctimas de esta enfermedad, que causaba grandes complicaciones pulmonares.
– 1918-1919: gripe española
Balance: hasta 50 millones de muertos (CDC)
La gripe llamada «española», que atacó entre septiembre de 1918 y abril de 1919, es considerada como la más mortal de la historia en un lapso tan corto.
Mató cinco veces más que los combates de la Primera Guerra mundial. El virus causó sus primeras víctimas documentadas en Estados Unidos, se propagó luego en Europa, y luego afectó a todo el mundo. Su tasa de mortalidad fue calculada en 2,5% (CDC).