Río de Janeiro/Brasil/AFP
Ya están definidas las semifinales de la Copa América-2019: Brasil-Argentina y Chile-Perú, es decir, el Superclásico de las Américas y el Clásico del Pacífico, dos historias de mucha rivalidad que prometen espectáculo en los dos partidos que repartirán los boletos para la final del Maracaná.
Y Colombia y Uruguay, dos de las selecciones que mejor imagen habían dado en la primera fase del torneo, tendrán que ver el desenlace desde fuera, sentenciadas ambas desde el punto de penal.
¿Qué puede esperar el aficionado al fútbol de este nuevo episodio de rivalidad entre brasileños y argentinos? “Pueden esperar dedicación, fuerza de voluntad, responsabilidad pero con fútbol alegre, jugadores ofensivos (de ambos lados) que tienen cualidades suficientes para hacer un excelente partido. El público va a tener un gran espectáculo”, aseguró el veterano zaguero de la Verdeamarela Thiago Silva.
La torcida, que sueña con levantar una novena copa continental, teme el resurgir de Lionel Messi, que hasta ahora no ha hecho un buen torneo. “Mi nivel no es el mejor, no estoy jugando como esperaba (…) No está siendo mi mejor Copa América”, admitió el ‘10’ argentino tras la clasificación a semifinales.
Pero Thiago Silva ha sufrido ya al Messi de Barcelona y sabe de lo que es capaz de hacer. “Es un jugador que por más que lo estudies, nunca vas a entender la diferencia que él puede hacer. En determinados momentos crees que va a hacer una cosa, y saca del sombrero algo que no imaginas. Esa es su diferencia”.
Y remachó: “Es claro que todo cuidado es poco para un equipo con el mejor jugador del mundo”.
Será un nuevo capítulo de una vieja rivalidad regional que se ha extendido al planeta fútbol. El 106 según la FIFA y los brasileños, aunque los argentinos agregan cinco encuentros más para que la igualdad sea máxima: 42 victorias para cada equipo y 26 empates; con 176 goles para Argentina por 171 de Brasil.
Según la FIFA, Brasil tiene 41 victorias, por 38 para la Albiceleste y 26 igualdades. El ‘pique’ alcanza hasta estos pequeños detalles.
El escenario del encuentro será mañana el Estadio Mineirao de Belo Horizonte, el mismo en el que Brasil sufrió la mayor humillación de su historia al perder 7-1 contra Alemania en la semifinal del Mundial-2014.
“Nadie aquí tiene amnesia ni va a olvidar lo que ocurrió, pero la vida es así, no podemos quedarnos pensando en las cosas malas que pasamos. Tenemos que pensar en las cosas buenas”, dijo Thiago Silva, uno de los supervivientes de aquella selección, tratando de expulsar los fantasmas del pasado.
Pero en una buena tarde, Messi es capaz de hacer revivir las peores pesadillas de la torcida brasileña.
El delantero Gabriel Jesus aseguró que será muy importante “tener una defensa sólida” porque “Argentina nos va a atacar”, pero manifestó que Messi y Sergio Agüero “van a tener que sudar” para batir a Alisson Becker.
El miércoles en el Arena do Gremio, en Porto Alegre, se disputará otro duelo con tradición en Sudamérica, el ‘Clásico del Pacífico’.
Las tensas relaciones que han mantenido los dos países vecinos en muchos momentos de su historia desde que se independizaron del colonizador español no han hecho más que aumentar la rivalidad en el fútbol.
Chile, tras eliminar en los penales a Colombia, sigue en lucha por el tricampeonato y ha demostrado que no cederá con facilidad su corona.
Perú, por su parte, recuperó el amor propio tras el 5-0 encajado ante Brasil en el último partido de la fase de grupos, y consiguió el último boleto para semifinales al eliminar en los penales al Uruguay, de las estrellas Edinson Cavani y Luis Suárez, quien precisamente erró el lanzamiento que condenó a su equipo.
El ambiente en la delegación peruana, no obstante, no parece el más adecuado, con los jugadores enfrentados a la prensa de su país, muy crítica tras la debacle ante la anfitriona.
“Mucha gente dice que Perú no tiene garra, pero demostramos lo que estos muchachos han hecho en la cancha (…) Hemos demostrado que este grupo tiene garra, tiene sangre, tiene huevos”, declaró tras el partido el capitán Paolo Guerrero, el único jugador inca que atendió a los medios.
Precisamente, Guerrero se verá en semifinales con el chileno Eduardo Vargas, los dos máximos goleadores en activo de la Copa América, ambos con 12 goles.
Y con el pase a semifinales, los dos se han asegurado jugar dos partidos más para tratar de alcanzar los 17 goles del brasileño Zizinho y del argentino Norberto ‘Tucho’ Méndez, máximos goleadores históricos del torneo.
La Roja se entrenó ya en Porto Alegre y Perú, que tendrá un día menos de descanso que su rival, realizó una sesión regenerativa.