«Saludamos la firme y valiente postura de la Iglesia Católica y las iglesias históricas, la Universidad de El Salvador, las organizaciones ambientalistas y la mayoría de la población que, en la más reciente encuesta de la UCA, se manifiesta contra la explotación minera (sólo el 23% avala la minería)», comentó ADES en su comunicado.
Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
La Asociación de Desarrollo Económico Social (ADES) y la comunidad Santa Marta se pronunciaron ante la aprobación de la nueva Ley de Minería, por la bancada oficialista y sus aliados. Reiteraron su rechazo por la reactivación de la minería metálica en El Salvador, ya que representa un peligroso atentado contra el agua, los ecosistemas y la vida misma de la población.
En ese sentido, ADES – Santa Marta, condenaron la aprobación de esa «nefasta» normativa que ha derogado la prohibición «de la más nociva de las industrias extractivas». Con esto, la actual Asamblea Legislativa revierte una medida lograda tras doce años de lucha social, mediante un amplio consenso nacional y escrita con la sangre de los mártires ambientales, señaló ADES.
Los líderes de ADES-Santa Marta reafirmaron que la Ley General de Minería Metálica representa el mayor atentado contra el agua, el medio ambiente, la salud y la vida de las presentes y futuras generaciones. «Representa el más grave peligro para nuestra existencia como país». Esto tomando en cuenta todas las consecuencias que se tuvieron años anteriores con la explotación minera y que dañaron a varias comunidades, sobre todo en San Sebastián, La Unión, donde se contaminó un río completo.
Fue el pasado lunes 23 de diciembre, un día antes de Nochebuena, que los oficialistas aprobaron sin estudio y sin consultarle a la población la Ley General de Minería Metálica, siendo un duro golpe a la lucha social.
«Saludamos la firme y valiente postura de la Iglesia Católica y las iglesias históricas, la Universidad de El Salvador, las organizaciones ambientalistas y la mayoría de la población que, en la más reciente encuesta de la UCA, se manifiesta contra la explotación minera (sólo el 23% avala la minería)», comentó ADES en su comunicado.
Como organización social se suman a las voces que exigen la derogación de esta» ley de contaminación, destrucción y muerte». Al mismo tiempo, instaron a la organización, movilización y resistencia frente a los proyectos mineros, en caso que esta normativa se mantenga.
También, instaron a la sociedad salvadoreña a reflexionar profundamente sobre las consecuencias de la falta de institucionalidad, separación de poderes y contrapesos democráticos; y sobre el comportamiento de funcionarios que no escuchan la opinión del pueblo y que imponen sus proyectos sin consulta ciudadana, sin estudios técnicos, sin argumentos y sin importarles sus terribles consecuencias.
A la comunidad internacional pidieron el acompañamiento para demandar la libertad absoluta de los líderes comunitarios que están criminalizados y perseguidos judicialmente en represalia por denunciar la reactivación de los proyectos mineros. Los líderes ambientalistas ya habían sido sobreseídos, pero serán juzgados nuevamente en el mismo caso.