Washington / AFP
La libertad de prensa está en declive en todo el mundo, con regímenes autoritarios pero también gobiernos democráticos que intentan suprimir el periodismo independiente, dijo el miércoles Freedom House, ONG independiente especializada en derechos humanos, con sede en Estados Unidos.
En su informe anual, Freedom House, que tiene sedes en Washington DC y Nueva York, dijo que la libertad de prensa ha visto un declive notable en Europa y que el desprestigio de la prensa que practica el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, «ha exacerbado seriamente una erosión continua de la confianza del público en los principales medios de comunicación».
Según el informe, las actitudes de Trump hacia la prensa libre han tenido un impacto tangible en el resto del mundo. Los periodistas fuera de Estados Unidos tienen ahora «menos razón para creer que Washington vendrá en su ayuda si se violan sus derechos básicos», dijo Freedom House.
«En algunas de las democracias más influyentes del mundo, líderes populistas han supervisado un intento concertado de ahogar la independencia de los medios», indicó Sarah Repucci, directora de investigaciones de Freedom House.
«Las amenazas a la libertad de los medios de comunicación a escala global son preocupantes en sí mismas, pero es su efecto en la democracia lo que las vuelve peligrosas de verdad».
El informe dice que en algunos estados democráticos «grandes segmentos de la población ya no reciben información y noticias imparciales» como resultado de «sutiles esfuerzos» de los gobiernos por debilitar la independencia periodística.
Esto coincide con una tendencia de corte populista en la que ciertos líderes se presentan a sí mismos como «defensores de mayorías» agraviadas y privadas de derechos y buscan desacreditar a los órganos de prensa independiente y suprimir el debate abierto, dijo la ONG.
En Rusia, la compra del principal diario nacional por parte del gobierno busca, según apunta el informe, «infundir la cobertura con un sesgo partidista», mientras que en China, el Partido Comunista pretende expandir su influencia sobre la producción de los medios y los canales de distribución.
La investigación de Freedom House también dedica pasajes al gobierno de Viktor Orban en Hungría y al de Aleksandar Vucic en Serbia, que han logrado extinguir al periodismo crítico en sus países y consolidaron la propiedad de los medios, que han depositado en manos de amigos y aliados.
También en India, dice el informe, el gobierno del primer ministro Narendra Modi ha buscado presionar a medios independientes y revocó licencias para la televisión, dejando a fuera del aire a organizaciones que «no han sido amigables» con su gestión.
Pero no todas son malas noticias: en países donde la democracia se está fortaleciendo, se han visto modestos avances en la libertad de prensa. Esto incluye a Etiopía, Malasia, Ecuador y Gambia.