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El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), Leonidas Iza, negó el viernes su intención de promover el derrocamiento del jefe de Estado ecuatoriano Guillermo Lasso, quien horas antes denunció un intento de golpe de Estado detrás de las movilizaciones indígenas que ya cumplen 13 días.
El mandatario Guillermo Lasso afirmó en una alocución televisada que la intención del líder indígena es derrocarlo.
Ante las acusaciones de Lasso, Leonidas Iza, dijó en medio de la asamblea popular celebrada en la Casa de la Cultura, en el centro de Quito que «hay una decisión del pueblo, que quiere que el presidente de la República, si no ha tenido capacidad para resolver los problemas, se vaya».
Durante su intervención en la asamblea popular, Iza anunció que se iba a dar un «ultimátum» a Lasso y que «el siguiente paso» era promover en la Asamblea Nacional un proceso de destitución contra el jefe de Estado.
Leonidas Iza denunció la represión policial y el desalojo a la fuerza de los asistentes a la asamblea popular en el centro cultural, tras una larga jornada de disturbios y enfrentamientos entre manifestantes y policías en los alrededores.
«En lugar de recibir los resultados, hemos recibido un ataque absolutamente violento por parte de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional», apuntó Iza.
Leonidas Iza anunció que el movimiento indígena se va a reorganizar para continuar la movilización, principalmente en la capital ecuatoriana. «Necesariamente vamos a continuar», concluyó.
El viernes un grupo de asambleístas presentaron un pedido para destituir al presidente Lasso, que será debatido este sábado por el Pleno de la Asamblea Nacional.
Desde el inicio de las movilizaciones el 13 de junio, se han contabilizado al menos cinco fallecidos y no menos de 200 heridos entre manifestantes y fuerzas de seguridad, así como más de 100 detenciones, según organizaciones de derechos humanos.
