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París/Francia/AFP
El Lyon desafía hoy al Barcelona de un Lionel Messi que tiene entre ceja y ceja reconquistar la Champions, mientras que el vigente subcampeón Liverpool recibe al siempre candidato al título Bayern Múnich en la ida de los octavos de final del certamen europeo.
“Vamos a darlo todo para que esa copa tan linda vuelva al Camp Nou”, decía Messi en agosto de 2018 ante los aficionados azulgranas, que vieron ganar este trofeo a su equipo por última vez en 2015.
Tras una fase de grupos inmaculada, el equipo azulgrana inicia los octavos en plena forma como líder de su Liga y con sus principales pesos pesados listos para el duelo en el estadio del Lyon.
El capitán Leo Messi está recuperado de sus problemas en el muslo derecho y volverá a ser el guía de su equipo, acompañado adelante por su escudero uruguayo Luis Suárez y el joven extremo francés Ousmane Dembelé.
La principal novedad en la convocatoria azulgrana es la vuelta de Samuel Umtiti, superados sus problemas de rodilla, aunque es poco probable que tenga minutos ante su exequipo.
En el Lyon se perderá la ida por acumulación de tarjetas su referente en ataque y capitán, el campeón del mundo con Francia Nabil Fekir.
El Lyon ha enfrentado en seis ocasiones al Barcelona en la Champions y nunca ha ganado (4 derrotas y 2 empates).
Duelo de calidad
Mientras tanto, con cinco títulos cada uno en el palmarés, el Liverpool-Bayern Múnich se pinta como una final adelantada.
No obstante, las dos escuderías chocan en octavos, con un Jurgen Klopp que se enfrenta a su antiguo rival en la Bundesliga, cuando dirigía a una versión muy atractiva del Borussia Dortmund.
Esta vez su Liverpool, subcampeón de la pasada edición, es favorito frente a un Bayern Múnich lejos de su mejor forma este año, aunque la ausencia de Virgil van Dijk en defensa es un problema para los Reds.
Tampoco están por lesión Joe Gomez y Dejan Lovren, por lo que jugará como central el brasileño ‘multiusos’ Fabinho.
El gigante bávaro tiene la duda en ataque de su mejor hombre en las últimas semanas, el francés Kingsley Coman, que se lesionó el viernes un tobillo tras marcar dos goles y dar una asistencia (3-2 ante el Augsburgo).
