Madrid/España/AFP
El Tottenham, que ya ha hecho historia al clasificar para su primera final de ‘Champions’, quiere acabar la gesta levantando hoy la ‘Orejona’ en la final contra el Liverpool de un Jurgen Klopp que afronta su segundo asalto.
Tras maravillar a todos remontando una goleada en semifinales ante el Barcelona (0-3, 4-0), el Liverpool alcanzó su segunda final de Liga de Campeones consecutiva, con la idea de hacer olvidar la derrota del pasado año frente al Real Madrid en Kiev.
El equipo inglés ha hecho una excelente temporada, pero ha visto como la Premier League, que no gana desde 1990, se le escapaba en el último suspiro, al quedar segundo a un solo punto del ganador el Manchester City.
Y ahora la ‘Orejona’ se perfila como la gran oportunidad para resarcirse y dar una alegría a los aficionados ‘Reds’, miles de los cuales llenarán hoy el estadio Wanda Metropolitano de Madrid.
Y es que la gran remontada ante Leo Messi y sus compañeros azulgranas ha llenado de esperanzas a los ‘Reds’ de cara a culminar el camino europeo a lo grande, en la segunda final europea totalmente inglesa, después que el Chelsea ganara la Liga Europa el miércoles ante el Arsenal (4-1).
“No puedo estar más orgulloso de estos chicos, pero no es el momento de relajarnos”, afirmó Klopp en una entrevista con los medios de su club.
El Tottenham es “un muy buen equipo”, así que “será un partido muy duro”, añadió el técnico alemán del Liverpool.
Famoso por su juego atrevido, Klopp se enfrentará a un Tottenham que tampoco renuncia a la presión alta y el juego ofensivo.
Los ‘Reds’ volverán a confiar en su tridente de ataque formado por Mohamed Salah, Roberto Firmino y Sadio Mané para intentar agujerear la portería defendida por Hugo Lloris, mientras por detrás Virgil van Dijk debería encargarse de dar seguridad y fortaleza en el eje de la defensa.
Esperando a Kane
Eso sí, el central holandés tendrá trabajo pues la estrella del ataque del Tottenham, Harry Kane, salta al terreno de juego dispuesto a llevarse la ‘Orejona’.
“Me siento bien”, dijo el lunes el delantero de los ‘Spurs’, matizando que “la decisión es cosa del entrenador”.
Ver a Kane sobre el terreno de juego, sin duda, supondría una inyección de moral y juego añadidos para el equipo de Mauricio Pochettino, en su primera final de Liga de Campeones en sus más de 130 años de historia.
“Si conseguimos ganar, escribiremos la historia y cambiaremos la percepción de este club fantástico”, aseguraba hace dos semanas Pochettino, para el que el trofeo europeo cerraría “nuestra mejor temporada en los últimos cinco años”.
Cuartos en la liga inglesa con plaza en ‘Champions’ garantizada para el próximo año y en una final del máximo torneo continental, la moral tampoco falta en un equipo que eliminó al City en cuartos de final y después se deshizo en semifinales del Ájax de Ámsterdam, verdugo del Real Madrid.
“Todo el mundo está contento, fue una buena decisión venir a Madrid un par de días antes de la final”, dijo el defensa belga de los Spurs, Jan Vertonghen, a los medios de su club tras unos entrenamientos en la ciudad deportiva del Real Madrid.