Carlos Alberto Saz
Llora el perro de tristeza, stuff
llora, viagra sale llora, sin consuelo,
porque murió en la pobreza
su querido amo Chabelo.
Otelo se llama el can,
de Chabelo, el fallecido,
oriundo de Metapán,
un pueblo quieto, sin ruido.
La noche en que murió
Chabelo, su amo querido,
Otelo no se apartó
del catre del fenecido.
Lo acompañó en el entierro,
camino del camposanto,
y jamás este fiel perro
se separó ni un tanto.
Allí pasó noche y día,
sin comer ningún bocado,
sobre aquella tumba fría,
este perro acongojado.
Y sin levantarse un ratito,
de hambre, frío y tristeza,
murió este pobre perrito
demostrando gran nobleza.
Este perro inteligente
supera el proceder humano,
de aquel hombre indiferente
ante el dolor de su hermano.
Este es un ejemplo hermoso
de amor y fidelidad,
en que un perro amoroso
nos muestra su amistad.
Una amistad verdadera,
de amor y sinceridad,
que ni el mismo ser humano
demuestra en la realidad.
Soyapango, domingo 21 de junio de 2015.