Lo que no se veía antes en El Salvador

Por Elder Gómez

Colaborador

Una vez un editor de un periódico donde yo trabajé, me dijo molesto: es verdad que hay apertura, pero no abuses…!!! porque había escrito una nota sobre los niños desaparecidos durante la guerra civil en El Salvador (1980-1992), en la que las fuentes que citaba en mi escrito informativo, resaltaban la complicidad del ejército en esos hechos de lesa humanidad.

Borró esa parte de la nota antes de publicarla.

Ahora me alegra que ese mismo medio haya dado apertura a organizaciones de izquierda, aunque sea para vociferar en contra del actual gobierno del presidente, Nayib Bukele.

Organizaciones y personajes de la izquierda salvadoreñas, que antes estaban vetados en muchos medios de comunicación, ahora gozan de una amplia acogida para hacer críticas voraces al actual gobierno.

Qué bueno que así hubiera sido antes, por el bien de la entonces incipiente democracia, pero lastimosamente, no, no fue así, y hasta hubo -entonces si-, persecuciones políticas contra periodistas, con intentos de asesinato y crímenes consumados…y El Salvador supuestamente ya en paz.

Los Medios de Comunicación sirvieron de plataforma política para atacar a los opositores del partido politico en el gobiernos de turno (de derecha), porque también formaban parte de ellos, del Sistema, y tenían séquitos de periodistas cómplices, ahora enquistados en la actual administración de Bukele.

El desgaste mediático mutuo, ha llevado a los partidos políticos tradicionales al fracaso.

Había listado con nombres de organizaciones y personajes de la izquierda y opositores a los gobiernos de entonces, que no tenían voz en la mayoría de medios, incluso, hasta el que fue Obispo Auxiliar de San Salvador, el ahora Cardenal, Gregorio Rosa Chávez, estaba oficialmente silenciado mediáticamente, y era prohibido citarlo en notas de televisión, radio y prensa escrita. Solo nos salvábamos los corresponsales de las agencias Internacionales de Noticias.

Ahora veo con asombro la gran cabida que tiene, por ejemplo, el izquierdista FMLN, y sus organizaciones sociales, en los medios de comunicación, cuando antes eran «los terroristas» (y ya estábamos supuestamente en paz en El Salvador), y varios de cuyos militantes y de sus diputados tenían los espacios informativos cerrados.

Hubo, en una ocasión, que un editor quitó el título de «Diputada», a la entonces legisladora, Nidia Diaz , en una nota que había yo escrito, para escribirle con desprecio el apelativo de «ex terrorista».

Pero qué bueno que ahora sí hay democracia y libertad de prensa y de expresión -con responsabilidad, y sin libertinaje-, en El Salvador, y con Medios estatales para equilibrar la balanza, aunque comandados por periodistas provenientes «de la esquina», como dice el presidente Bukele a la oposición política, los otros «troyanos».