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Beirut / AFP
Israel llevó a cabo el domingo nuevos bombardeos en Siria, por segunda vez en menos de una semana, causando diez muertos entre las fuerzas leales al gobierno de Bashar Al Asad, informó el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, indicó este domingo que ordenó tales bombardeos como respuesta a los cohetes lanzados el martes por la noche desde Siria hacia el Estado hebreo.
El ataque se produce en un contexto de aumento de la tensión en Oriente Medio entre Estados Unidos e Irán.
Los misiles israelíes mataron a tres soldados del ejército sirio y a siete combatientes aliados de nacionalidad extranjera, según el OSDH.
Los medios oficiales sirios confirmaron los disparos de misiles israelíes cerca de la capital, Damasco, pero también en la provincia de Quneitra (sur), situada en la meseta de los Altos del Golán, en su mayoría ocupada y anexionada por Israel.
La defensa antiaérea siria respondió a los disparos israelíes, según la agencia oficial Sana, que citó fuentes militares.
«No toleraremos disparos contra nuestro territorio», advirtió Netanyahu en un comunicado, mientras que el ejército israelí consideró «responsable» al régimen sirio de «cada acción llevada a cabo contra Israel».
El ejército israelí dio cuenta de dos disparos de cohetes el sábado por la noche procedentes de Siria contra el monte Hermón, en los Altos del Golán ocupados.
Las fuerzas armadas israelíes afirmaron haber respondido atacando a «dos baterías de artillería sirias, varios puestos de observación e inteligencia en los Altos del Golán y una batería de defensa aérea SA-2».
«Durante los ataques, se activó un sistema israelí de defensa aérea debido a los disparos de la defensa antiaérea siria. Ningún cohete explotó en Israel», añadió el ejército israelí.
– Defensa antiaérea siria –
En Damasco, la defensa antiaérea siria actuó contra «misiles enemigos», disparados desde Israel contra «posiciones» en el suroeste del a capital, según una fuente militar siria citada por la agencia Sana.
Según el OSDH, los ataques apuntaron contra «depósitos y posiciones» de las fuerzas sirias, las fuerzas iraníes y combatientes de Hezbolá, sobre todo en Kesswa, al suroeste de Damasco.
El Observatorio indicó que murieron siete combatientes extranjeros, sin precisar su nacionalidad.
El ataque se cobró la vida de tres soldados sirios e hirió a otros siete en Quneitra, según Sana.
Los Altos del Golán son un territorio estratégico, principalmente por sus recursos hídricos, y fue conquistado por Israel en 1967 durante la guerra israelo-árabe, y anexionado en 1981. La ONU lo considera un «territorio ocupado» de forma ilegal.
Los últimos bombardeos ocurridos en Siria imputados a Israel se remontan al 27 de mayo, cuando un misil israelí alcanzó la provincia de Quneitra y mató a un soldado sirio. En enero, bombardeó posiciones iraníes en Siria y causó 21 muertos, según el OSDH.
