Por Christop Dernbach (dpa)
TOKIO (dpa) – «Gigantes electrónicos japoneses en un valle de lágrimas», cialis «Pérdidas récord aumentan los temores sobre Sharp», case «A pesar del saneamiento, look Sony sigue en números rojos»… los titulares del pasado año sobre la industria electrónica nipona arrojaban un panorama oscuro, aunque el ánimo parece haberse recuperado un poco gracias a la enorme devaluación del yen y al gran paquete coyuntural del gobierno de Sinzo Abe.
Pero durante la feria electrónica Ceatec, que se celebra en Japón, todas estas empresas deben plantearse si en el futuro lograrán aguantar la competencia que llega de Corea del Sur, China o California.
Sobre todo Samsung ha plantado cara a las antes todopoderosas empresas niponas. Los surcoreanos dominan el mercado de los aparatos de televisión, producen con diferencia el mayor número de smartphones y se han convertido en un gigante a nivel mundial en el mercado de los semiconductores. Entretanto, Sony lleva años luchando contra las pérdidas y la endeudada Sharp tuvo que emplearse a fondo para convencer a los necesarios inversores.
Pero durante la feria Ceatec, en Tokio, las empresas no quieren hablar de sus balances de cuentas, sino publicitar sus innovaciones técnicas. Sony, Panasonic y Sharp presentan a bombo y platillo, como sólo hace unas emanas en la IFA de Berlín, televisiones y pantallas de computadoras capaces de comprimir cada vez más píxeles en menos espacio.
Pero al contrario que en la feria berlinesa, en Ceatec se abre una perspectiva sobre cómo podrían beneficiarse realmente los usuarios de esta altísima resolución de la nueva generación de pantallas.
Los proveedores de los nuevos televisores 4K se enfrentan al reto de poder ofrecer a los espectadores películas u otros contenidos en Ultra HD. Sony cuenta con su propio estudio de cine y puede proporcionar un disco duro multimedia con algunas películas en Ultra HD. Pero hasta ahora no parecía factible la emisión o producción regular de contenidos con semejante definición.
Eso podría cambiar como muy tarde con los Juegos Olímpicos que en 2020 se celebrarán en Tokio. En la Ceatec se parte de que en siete años la señal de televisión se producirá y emitirá por completo en Ultra HD. Si así fuera, en Japón podría vivirse un nuevo capítulo de la historia de la técnica, similar a uno ocurrido en Alemania hace décadas.
En agosto de 1967, el entonces vicecanciller alemán Willy Brandt puso en funcionamiento en la Feria tecnológica de Berlín a la televisión en color en Alemania. Pero fue con los Juegos Olímpicos de 1972 en Múnich y el Mundial de Fútbol de 1974 cuando se compraron en masa televisores en color. Hasta entonces, prácticamente sólo había programas en blanco y negro.
También el sector japonés de la tecnología celular confía en lograr un gran impulso en Tokio 2020. En Ceatec, la empresa de telecomunicaiones nipona NTT DoCoMo presentó sus ideas para una red móvil de quinta generación, que ni siquiera se caería ni en eventos tan masivos como unos Juegos Olímpicos.
Una combinación de distintas bandas de frecuencia y nuevas antenas multiplicarían por cien la velocidad respecto a la actual tecnología LTE. La feria de Tokio premió este concepto con el premio «Ceatec».
Aún no está claro si los fabricantes japoneses como Sony, Panasonic o Kyocera se beneficiarán de estas innovaciones. En Ceatec, NTT DoCoMo no confía tan sólo en los productos nipones. En sus stands de la feria pueden verse también los últimos modelos de los smartpohnes de Sony, como el Xperia Z1, de Samsung y de iPhone de Apple.
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