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Tomado de UNIVISIÓN
Los incendios forestales destruyeron la ciudad turística hawaiana de Lahaina el 8 y 9 de agosto de 2023, dejando a muchos de sus aproximadamente 13,000 residentes sin hogar.
Los fuegos se extendieron en otras áreas de Maui, la segunda isla más grande de Hawaii, y su Isla Grande. El 10 de agosto, el presidente Joe Biden emitió una declaración de desastre que autoriza la ayuda federal para las comunidades en peligro.
Ivis García, una planificadora urbana que ha investigado los esfuerzos de recuperación de desastres en Puerto Rico, explica cómo responde el gobierno de EEUU a desastres como estos y cómo la geografía de Maui podría interferir con la entrega de ayuda.
¿Es más difícil que la ayuda llegue a una isla que a los Estados Unidos continentales?
La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés), que brinda asistencia de emergencia después de desastres, tiene que lidiar con grandes desafíos de transporte en casos como este.
Inicialmente, FEMA se concentrará en llevar alimentos, generadores, catres, comidas y cualquier otra cosa que la gente necesite, y esa ayuda llegará en aviones y barcos en lugar de por carretera.
Después, FEMA podría traer casas temporales, a menudo llamadas remolques, pero solo si hay suficiente terreno adecuado para acomodarlas. En Puerto Rico no hubo muchos remolques provistos por FEMA después del paso del huracán María en 2017. En las islas, como Maui, generalmente no hay mucho espacio para instalar parques de remolques, con desastre o no.
Asimismo, será más difícil desplegar personal de emergencia. Los trabajadores humanitarios tendrán más problemas para llegar a Maui que para llegar a Carolina del Norte, por ejemplo. Y podría haber pocos lugares para que se queden. No está claro si eso será un problema en Maui, donde había unas 26,000 habitaciones de hotelantes de que estallaran los incendios forestales.
Todo lo relacionado con la respuesta inmediata a un desastre en lugares como Hawaii y Puerto Rico es más costoso que en el continente. Eso incluye comida, vivienda y transporte. No puede simplemente conducir hasta allí o alquilar un automóvil cuando llegue. Por lo general, hay poco transporte público disponible y hay pocas carreteras, incluso si un trabajador humanitario puede obtener un vehículo.
Cuando la ayuda llega en barco, descargarla puede ser difícil y llevar mucho tiempo. El desastre puede haber dañado los puertos locales. Los puertos en lugares como Lahaina suelen ser pequeños y no aptos para la carga. Los informes no indican que Kahului, el puerto de carga de Maui, haya sufrido daños.
Hawaii está más cerca de California que de Japón, pero a miles de millas de ambos lugares. Debido a las leyes de los EEUU, toda la asistencia pagada por el gobierno debe originarse en los Estados Unidos. Lo mismo es cierto en gran medida también para la ayuda privada debido a la Ley Jones, una ley de 1920 que requiere que los bienes enviados entre puertos de EEUU sean transportados por embarcaciones que pertenecen a estadounidenses y que son principalmente operadas por EEUU.
El gobierno tiene el poder de emitir una exención de la Ley Jones durante los desastres. El expresidente Donald Trump emitió una exención de 10 días después del huracán María.
Algunos miembros del Congreso han buscado durante años derogar la Ley Jones, al menos para el envío a lugares remotos como Hawaii, Alaska, Guam y Puerto Rico, sin éxito.
¿Qué pueden esperar los residentes de Maui de FEMA?
Los residentes de un área de desastre pueden calificar para la asistencia para necesidades críticas de FEMA, un pago único que en desastres recientes ha sido de $700.
Además de la ayuda de emergencia, alimentos y ropa, FEMA ayudará a los residentes a solicitar ayuda para la vivienda según sea necesario. La ayuda para vivienda de FEMA rara vez supera los $35,000; otras agencias gubernamentales a veces proporcionan más fondos.
FEMA generalmente establece un centro de asistencia para esto, a menudo en coordinación con organizaciones locales sin fines de lucro. Este proceso podría tardar varios meses en ponerse en marcha, y FEMA también acepta solicitudes en línea de personas. Mientras tanto, los residentes desplazados pueden obtener dinero o cupones para cubrir estadías breves en hoteles.
Los costos de alojamiento son muy altos en Maui, incluso en circunstancias normales. Por lo tanto, es probable que a muchos residentes locales les resulte casi imposible cubrir sus costos de vivienda a corto plazo con la asistencia de FEMA. Eso significa que es probable que un gran número de personas desplazadas se trasladen a otra isla hawaiana u otro estado con viviendas y hoteles más baratos. Lo más probable es que muchos de ellos no regresen.
