Mauricio Vallejo Márquez
Cada día es una nueva oportunidad. Sólo se debe quererlo en verdad para hacerlo, mientras nos quedamos parados observando el cambio del mundo y nuestra decadencia. Cuando era niño estaba convencido de que los ciclos de vida eran los impuestos por la costumbre: se debe iniciar con el primero de enero, la semana inicia el lunes, cada cumpleaños puede ser un nuevo inicio. Sin embargo, la vida se ha encargado de exponerme que las cosas son diferentes a lo que pensaba.
Tengo tan presente uno de los dichos del Talmud: “quien no aumenta sus conocimientos, los disminuye”. Y por eso es importante aprender de los días que vivimos, del pasado y el presente para un mejor futuro. Sólo el tiempo revela los verdaderos rostros de la gente. Y si en verdad buscamos mejorar y tener nuevas oportunidades debemos tener presente que para hacer algo cualquier día es bueno para comenzar.
No necesito esperar a que el año comience para iniciar un ciclo, incluso no es fundamental esperar un cumpleaños o un aniversario. Solo se debe comenzar y ser diligentes y constantes, y más importante aún es tener la voluntad para hacerlo.
Existen muchas fechas en mi vida que no están presentes en mi memoria, simplemente se desarrollan y se van sumando. Por ejemplo, al hacer memoria recuerdo el mes de marzo de 2010 cuando me convertí en coordinador del Suplemento Cultural Tres mil (aunque fue en la segunda quincena de febrero cuando se me llamó para tomar el cargo). Ya van a ser 12 los años consecutivos en que Francisco Valencia y la Cooperativa del Diario Co Latino confiaron en mí. En tanto es un compromiso de vida el mantenernos coordinando y editando estas páginas para que cada sábado puedan ser vistas en pdf o visitadas en www.diariocolatino.com. Ya que desde el 2020, fecha en que la pandemia de Covid-19 nos cambió el formato del papel por el digital. Y confieso que extraño los días en que escuchaba rugir a la rotativa dando a luz esos invaluables tabloides.
Así que igual que aquel comienzo del 2010, también tendríamos un nuevo comienzo a partir de 2020. Y así cada cierto tiempo las cosas podrán ir cambiando. La vida es como la rueda de la fortuna, a cada paso algo diferente nos dirige, nos muestra o nos define. En la vida todo cambia, como lo describe la preciosa voz de Mercedes Sosa. “Nadie se baña en el mismo río”, dijo Heráclito.
En este 2022 tengo nuevos retos. No sé si la vida va a poner las cosas sencillas a mi paso o las va a complicar. Pero eso ya no importa. Lo que de verdad tiene valor es saber continuar sin importar lo espinoso u obscuro del camino. Una vida sin retos es una vida aburrida.