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Renán Alcides Orellana
Cuando recién iniciaba el nuevo siglo, thumb pilule Francisco Flores, recipe purchase uno de los ex presidentes más cuestionados de El Salvador, y por cierto hoy uno de los más buscados hasta por la Interpol, sin decir “agua va” recetó la dolarización a los salvadoreños. Triste inicio de una etapa para el país, sin moneda propia. Y lo más grave, todo a base del tremendo engaño de un falso bimonetarismo, que lo planteaba como la medida más saludable para la economía nacional: la circulación, simultánea y sin condiciones, del Colón y el Dólar.
Pero, el anunciado bimonetarismo, consignado en la Ley de Integración Monetaria (LIM), nunca fue tal. Se retiró de circulación la totalidad de los billetes salvadoreños y, sin restricciones, comenzó la circulación del Dólar, como única moneda de curso legal. De aquel golpe nacional, aún no se repone la población de más bajos recursos, ahora víctima de un creciente valor de los artículos de primera necesidad. Lo que antes valía un Colón ahora vale un Dólar. Así de sencillo…
Sin bien el origen de la crisis que abate al país, no puede atribuirse únicamente a la dolarización, que de suyo ha sido muy desgastante, cierto sí es que, a partir de los 4 gobiernos posteriores a los Acuerdos de Paz (16 de enero de 1992), también contribuyó una serie de malos manejos de la cosa pública. Actos de enriquecimiento ilícito de algunos políticos que, aun cuando eran del dominio público, fueron destinados al silencio “por haber prescrito”. (Figura que parece que sólo se da en la legislación salvadoreña, pero que, como sea, es triste experiencia para el pueblo humilde que, impotente, ha visto como muchos millones de dólares se han perdido en administraciones anteriores, por la prescripción). Casos muy conocidos, ahora con algunas excepciones por ser hechos juzgados o juzgándose, fueron los de: Fomiexport, Crediclub, Insepro/Finsepro, CREDISA, ISSS, MOP, ANDA, BFA, MSPAS, OBC… y ahora, el caso del desvío de millonarios donativos de Taiwán, aprovechados -para variar- por el mismo célebre ex presidente Flores… ¡linda herencia!…
Desde luego, la crisis integral tampoco es responsabilidad sólo del rubro económico. Involucra a los otros rubros y, por lo mismo, todos están llamados a enfrentarla. Son rubros o instituciones por naturaleza solidarias. En algunos casos han sido vanos los esfuerzos para superar las carencias o las fallas, especialmente aquellas donde más aprieta el zapato. Y uno de esos rubros, hoy por hoy, quizás hasta en peor situación que el económico, es la seguridad, especialmente por el índice de delincuencia, cuyas estadísticas son aterradoras. Y en ese orden, las demás áreas del ser y quehacer nacional.
Y al final, como componentes y efectos de la amarga realidad social y económica del país, no pueden ignorarse: el desempleo, el alto costo de la canasta básica, medicamentos caros y escasos y, como inevitable congoja, la emigración obligada hacia países del norte, a veces ya si fe y casi perdida la esperanza… Claro, plantear aquí esta cruda realidad, no es un llamado al desánimo, y menos a la derrota; al contrario, es un imperativo de la voz, de la voz individual y colectiva, hacia la unificación de esfuerzos, sin distingo de credo o pensamiento alguno, como única vía hacia la reivindicación integral del país. Siempre, después de la noche, brilla el sol… ¡Así sea!
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PUNTO Y APARTE. El caso de los niños salvadoreños migrantes detenidos en el Norte, ha sido impactante y desalentador. Las autoridades no deben quitar el dedo del renglón, para evitar que el caso sea, sencillamente, otro más… (RAO).
