¿Que son?
Las personas con valores morales tienen muy claro lo que está bien y lo que está mal. Sus valores morales no cambian en función de sus circunstancias, sino que se basan en un sólido conjunto de principios que guían sus acciones incluso cuando nadie las ve.
¿Por qué son importantes?
Hoy en día, los compañeros de clase, la música, las películas y los programas de televisión bombardean a los niños con mensajes distorsionados sobre lo que está bien y lo que está mal. Dichos mensajes pueden hacerlos dudar de sus valores morales.
Esto es especialmente cierto en la adolescencia. El libro Beyond the Big Talk (Después de “la charla padre e hijo”) dice que, a esa edad, los jóvenes “tienen que estar preparados para la intensa presión que sus compañeros y los medios de comunicación ejercerán sobre ellos para que sean populares.
Tienen que aprender a tomar decisiones basadas en sus valores morales, aunque eso signifique ir en contra de sus amigos”. Está claro que esta educación moral debe empezar antes de la adolescencia.
¿Cómo enseñarles valores morales?
Establezca un código moral
PRINCIPIO BÍBLICO: Las “personas maduras (…) tienen sus facultades perceptivas entrenadas para distinguir tanto lo correcto como lo incorrecto” (Hebreos 5:14).
*Califique las acciones. Utilice situaciones de la vida diaria y establezca contrastes. Por ejemplo, diga: “Esto es honrado. Esto no es honrado”, “Esto es una muestra de lealtad. Esto es una muestra de deslealtad”, “Esto es considerado, Esto es desconsiderado”. Con el tiempo, su hijo relacionará los valores morales con las acciones.
*Explíqueles por qué deben respetar su código moral. Razone con su hijo para ayudarlo a educar su conciencia. Por ejemplo, pregúntele: “¿Por qué es mejor ser honrado?, “¿Por qué mentir rompe las amistades?” o “¿Por qué está mal robar?”.
*Destaque los beneficios de tener elevados principios morales. Podría decirle: “Si eres honrado, las personas confiarán en ti” o “Si eres amable, la gente querrá estar contigo”.
Logre que sus valores sean el sello de identidad de su familia
PRINCIPIO BÍBLICO: “Sigan dando prueba de lo que ustedes mismos son” (2 Corintios 13:5).
*Toda su familia debe regirse por los mismos valores morales, así podrá decir con total sinceridad:
“Nosotros no mentimos”.
“En nuestra casa, nadie golpea a nadie ni le grita”.
“Nosotros no toleramos los insultos”.
De esta forma, su hijo verá que los valores morales no son simples reglas que debe seguir, sino que son el sello de identidad de su familia.
*Use situaciones cotidianas para hablar con su hijo de los valores morales de la familia. Puede compararlos con los de sus compañeros o con los que fomentan los medios de comunicación. Pregúntele: “Qué habrías hecho tú?” o “Qué habría hecho nuestra familia?”.
Refuerce los valores morales de sus hijos
PRINCIPIO BÍBLICO: “Tengan una buena conciencia” (1 Pedro 3:16).
*Felicítelos cuando se porten bien. Cuando su hijo se guíe por sus valores morales, felicítelo y explíquele por qué estuvo bien que actuara así. Por ejemplo, podría decirle: “Fuiste muy honrado. Estoy orgulloso de ti”.
Si su hijo le confiesa que ha hecho algo malo, agradézcale su sinceridad antes de corregirlo.
*Corríjalos cuando se porten mal. Ayude a su hijo a hacerse responsable de sus actos. Los niños deben saber qué han hecho mal y por qué en su familia no se tolera esa conducta. Algunos padres no quieren hacer sentir mal a sus hijos, pero hablar con ellos sobre lo sucedido los ayudará a educar su conciencia y a distinguir entre lo correcto y lo incorrecto.