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Barcelona/dpa
El entrenador del Barcelona, Luis Enrique, aseguró hoy que no cometió ningún error táctico en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones europea frente a la Juventus, si bien asumió toda la responsabilidad por la derrota 3-0 ante los italianos.
«En Turín, yo no me equivoqué en nada tácticamente, pero soy el máximo responsable de la derrota porque, si no fui capaz de transmitir el modo de jugar a mis jugadores, el error es mío», sentenció Luis Enrique.
Tras la severa y decepcionante derrota, el técnico español del Barcelona se había mostrado crítico con la actitud de sus jugadores en el primer tiempo del choque ante los campeones italianos.
Hoy, antes de que los azulgrana reciban mañana a la Real Sociedad en la Liga española de fútbol, Luis Enrique fue más condescendiente con sus futbolistas. Mantuvo, sin embargo, que el equipo «se equivocó sin balón» y que sus decisiones tácticas fueron las correctas.
«Yo decido todo, el esquema es mi responsabilidad. Pero eso no quita que pueda ser sincero y decir lo que yo pienso», señaló.
Después de remontar un 4-0 ante el Paris Saint-Germain con un 6-1 en el Camp Nou en la anterior instancia de la Champions, Luis Enrique no descartó que el Barcelona pueda repetir la gesta, el próximo miércoles, ante la Juventus, si la suerte está de su lado.
«Si tenemos la suerte como en Turín, mal vamos. Tuvimos muchas ocasiones para marcar goles. Ellos aprovecharon nuestra mala primera parte en ataque y defensa», apuntó el entrenador azulgrana.
«Tomaremos riesgos como siempre, los que sean necesarios. Tenemos que conseguir un gol menos que ante el PSG. Pero ahora me preocupa cero la Juve. Hay que buscar la química con la afición. Me preocupa mañana», prosiguió Luis Enrique en alusión al importantísimo choque ante la Real Sociedad.
Un nuevo tropiezo frente a los vascos prácticamente descartaría al Barcelona de la lucha por la Liga. Con el clásico en el Santiago Bernabéu a la vuelta de la esquina, el líder Real Madrid lo aventaja en tres puntos con un partido aplazado aún pendiente de disputar.
«Es normal que el ‘culé’ esté cabreado (molesto) porque la derrota escuece y nosotros somos los máximos responsables, yo el primero», asumió el técnico español.
«Es normal que puedan estar de uñas, pero sé que mañana va a ser un momento delicado y estaría encantado de que animaran a todos los jugadores porque todos sienten esta camiseta y son los primeros interesados en ganar», concluyó.
