Redacción Nacionales
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La Asociación de Periodistas de El Salvador (APES) denunció que la Policía Nacional Civil (PNC) acosó e intimidó en su vivienda a la madre del periodista y editor Ricardo Vaquerano, esto ocurrió ocho días después de que Gato Encerrado publicara una investigación periodística, donde evidencia el accionar de un grupo de sicariato dentro de la policía que, junto a civiles y empresarios, asesinaron a cientos de personas por encargo.
El hecho ocurrió la mañana del 30 de mayo en la vivienda de la madre de Vaquerano, en Santa Ana, al occidente de El Salvador, cuando un grupo de agentes argumentó que habían recibido una llamada de emergencia al sistema 911 por una supuesta denuncia de violencia intrafamiliar; dos días antes, la PNC llegó en dos ocasiones y estacionó una patrulla enfrente de la casa.
Según la APES, los agentes tomaron fotografías del DUI de otro familiar que los atendió, quien les explicó que desde esa vivienda no se había hecho ninguna denuncia, posteriormente, interrogaron a la madre del periodista sobre el nombre de todos sus hijos, mostrando especial interés en los varones y a qué se dedican.
Al finalizar el interrogatorio, los agentes policiales se marcharon en su patrulla, y horas más tarde, de este mismo día, volvieron a llegar a estacionarse afuera de la vivienda.
“Expresamos preocupación por este tipo de actuaciones contra familiares de periodistas, de las que se tienen más registros recientes, y llama a todos los elementos de seguridad pública y a las autoridades gubernamentales a respetar la integridad del periodista y su familia, especialmente en el contexto del Régimen de Excepción, en el que no se cuenta con las garantías del debido proceso”, indicó la APES.
El medio digital Gato Encerrado mostró su preocupación por este tipo de procedimientos policiales irregulares, en especial porque de acuerdo con investigaciones e informes de organismos de la sociedad civil han demostrado que previo a una acción ilegal, los agentes corruptos suelen hacer procedimientos irregulares como el denunciado.
Estos hechos se dan en el contexto del Régimen de Excepción que ha sido usado por el gobierno salvadoreño, para intimidar y acallar voces disidentes como las de líderes comunitarios, ambientalistas, sindicalistas, periodistas, entre otros.
Gato Encerrado señaló que han alertado a organismos nacionales e internacionales de defensa de derechos humanos como Cristosal, Human Right Watch, Front Line Defenders y la Relatoría por la Libertad de Expresión de la CIDH, así como a Artículo 19 у CPJ, quienes ya prestan atención a este caso.