Por Mariano Andrade
Nueva York/AFP
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, acusó a Occidente el miércoles en la ONU de haber «amamantado» al «monstruo» del terrorismo yihadista en Oriente Medio y advirtió de que la única forma de derrotarlo es formar una «gran alianza de paz que respete a los gobiernos de la región».
«Estamos de acuerdo en combatir el terrorismo», dijo Maduro, uno de los últimos líderes en hablar en la jornada de apertura de la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York. Criticó, sin embargo, la estrategia militar adoptada por Estados Unidos para enfrentar al grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Irak y Siria.
«Solamente una alianza que respete la soberanía de estas naciones, el concurso de sus gobiernos, de sus pueblos, de sus fuerzas armadas, derrotará de verdad al terrorismo islámico y a todas las fuerzas terroristas que han surgido como un Frankenstein, como un monstruo amamantado por el propio Occidente», advirtió en ese sentido.
Maduro, crítico del apoyo de Occidente a la oposición del régimen del presidente sirio, Bashar al Asad, recordó que si el gobierno de Damasco hubiese sido derrocado, «hoy en toda esa gran región de Siria, el Líbano, Irak y Jordania se hubiera establecido un poder de estos grupos terroristas».
«El gobierno democrático y constitucional de Siria ha detenido a los terroristas y los ha sufrido con miles de muertos», sostuvo.
Para Maduro, la epidemia del virus del Ébola es la «más grande amenaza» que sufre el mundo actualmente, pero las potencias están más ocupadas en «bombardear a los pueblos de Irak y de Siria».
Reforma de la ONU
En su primera intervención como presidente en el plenario de la ONU, Maduro se refirió por otra parte a la necesidad de reformar la organización, un tema que también tocaron otros mandatarios latinoamericanos como la brasileña Dilma Rousseff y el mexicano Enrique Peña Nieto.
La Carta de las Naciones Unidas es «uno de los poemas mas hermosos que podemos leer», ironizó Maduro, calificándola de «instrumento olvidado y violado de manera permanente en sus objetivos fundamentales».
Naciones Unidas requiere una «transformación profunda» y una «refundación democrática» para «adaptarse a un mundo multipolar, con países y regiones emergentes, voz propia, aspiraciones de ser respetados».
Maduro reiteró por otra parte el «rechazo al bloqueo criminal económico contra Cuba», al que calificó de «anacronismo de la Guerra Fría», y manifestó el apoyo de su país a Argentina «en su lucha contra las mecanismos de saqueos financieros a través de los fondos buitres»
Maduro también pasó revista al proceso político iniciado a fines de la década de los ’90 por el fallecido expresidente Hugo Chávez, enumerando los logros de la revolución bolivariana, como una «escolarización del 90%» y una caída de la tasa del desempleo del «20 al 5,5% el año pasado».
«No pudieron con el comandante Chávez, no podrán con nosotros», afirmó, tras denunciar los «acosos y conspiración permanente del imperio estadounidense», que «han retomado su ritmo de acción» tras la muerte del expresidente en 2013.
Banca en Consejo de Seguridad
Venezuela es candidata a una banca no permanente en el Consejo de Seguridad correspondiente a América Latina y el Caribe para el bieno 2015/16, en reemplazo de Argentina, cuyo mandato termina a fines de año.
La votación en la Asamblea General tendrá lugar el 16 de octubre y se necesita una mayoría de dos tercios de los miembros presentes para conseguir la banca, algo que debería ser un trámite para Venezuela, dado el apoyo que tiene de toda la región.
El Consejo de Seguridad, máximo órgano de decisión de la ONU, está integrado por cinco miembros permanentes con derecho de veto (Estados Unidos, Reino Unido, Rusia, Francia y China) y diez no permanentes repartidos de manera geográfica que rotan cada dos años.
Venezuela ya ocupó una banca en el Consejo de Seguridad en cuatro oportunidades: 1962/63, 1977/78, 1986/87 y 1992/93.