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Caracas / Prensa Latina
El presidente Nicolás Maduro agradeció a los ciudadanos estadounidenses que protegen la sede de la embajada de Venezuela en Washington y enfrentan agresiones de las autoridades de la nación norteña.
Mediante la red social Twitter, el jefe de Estado aseguró estar admirado por la solidaridad de los movimientos sociales norteamericanos que están en contra de las acciones intervencionistas de Estados Unidos contra el territorio bolivariano.
«Envío un saludo solidario, lleno de profunda admiración y agradecimiento al Colectivo de Protección de nuestra Embajada en Washington, quienes con valentía han enfrentado las agresiones de una derecha enferma y un imperio criminal. Ese es el digno pueblo de los Estados Unidos», escribió Maduro en la plataforma digital.
En esa línea de mensaje, el canciller de la República, Jorge Arreaza, exigió el jueves al Departamento de Estado norteamericano, cumplir con la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y proteger a los funcionarios venezolanos presentes en Washington D.C.
Asimismo, el ministro de Relaciones Exteriores, reiteró que la capital estadounidense sirvió como sede de la embajada venezolana hasta la ruptura de relaciones entre las naciones, el 23 de enero del presente año.
Arreaza también exigió a la administración estadounidense evitar las agresiones contra el grupo de ciudadanos norteamericanos que resguardan pacíficamente la sede diplomática para impedir su ocupación ilegal por los seguidores del diputado de la Asamblea Nacional en desacato, Juan Guaidó.
Las declaraciones de las autoridades de Caracas responden a una situación de violencia suscitada en las afueras del local diplomático donde los representantes de diversos movimientos de solidaridad han sido asediados por opositores venezolanos que pretenden asaltar la sede de la embajada, en presencia, incluso, de las autoridades policiales de esa nación.
El Servicio Secreto de Estados Unidos, por su parte, practicó la detención forzada y la agresión física de Gerry Condon, presidente de la norteamericana asociación de Veteranos por la Paz, que estuvo recientemente en Venezuela en solidaridad con el Gobierno bolivariano ante las políticas de la Casa Blanca contra el país suramericano.
