Alma Vilches
@AlmaCoLatino
Guillermo Wellman, magistrado del Tribunal Supremo Electoral (TSE) pidió al presidente de la República Nayib Bukele, apoyar financieramente la adquisición de tecnología para el conteo de votos en mesa y transmisión de resultados durante los comicios del 28 de febrero de 2021.
“El presidente debe apoyarnos ya que él es el principal promotor del uso de la electrónica si cree en la tecnología, debe apoyarnos para usarla en los procesos electorales”, enfatizó el magistrado Wellman.
Asimismo, señaló que de llegarse a aprobar el uso de tecnología en las mesas de votación, el TSE debe hacer convenio con la Organización de los Estados Americanos (OEA) para que controle y verifique dicha tecnología, y también contratar otra instancia que audite el proceso y el equipo no sea manipulado.
El uso de tecnología en las mesas forma parte de las propuestas para el conteo de votos, donde cada Junta Receptora de Votos (JRV) utilice una laptop, un teclado, impresor y escáner, todos portátiles. Con este sistema las marcas se procesarían en la mesa y desde ahí mismo se transmitiría hacia el Centro Nacional de Procesamiento de Resultados Electorales (CNPRE).
Con dicha propuesta se reemplazará la maquila de digitación, pues a través del equipo tecnológico se ingresarán los datos y facilitará a las personas integrantes de las JRV el proceso de escrutinio preliminar, aunque implicaría un despliegue logístico mucho mayor para movilizar los equipos. También sería necesaria una reforma de ley sobre la emisión automática de actas.
Este modelo pretende simplificar los procesos de escrutinio preliminar cuando convergen las elecciones de Asamblea Legislativa, Parlamento Centroamericano (PARLACEN) y Concejos Municipales.
Autorizan recolección de firmas
Los magistrados del TSE firmaron los libros para autorizar al partido en formación Movimiento Autentico Republicano (MAR), que inicie el proceso de recolección de las firmas requeridas para su inscripción, de acuerdo al artículo 13 de la Ley de Partidos Políticos.
El MARN es dirigido por Rafael Antonio Garciaguirre e integrado por salvadoreños que ostentan una vocación de servicio al prójimo. Cuentan con un proyecto símbolo “El Sueño Salvadoreño”, el cual consiste en generar en el país las condiciones y esperanzas de vida para que la población no tenga que salir a otros lugares.