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Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
“Ha sido un manejo más político del Gobierno alrededor de la pandemia donde ha querido mostrarse como el gran salvador de la salud de El Salvador. Para precisamente mostrar que son la Sala de lo Constitucional y la Asamblea Legislativa quienes se oponen a sus grandes medidas de control sanitario. ¿Cuál ha sido la medida de control sanitario que ha promovido? Es precisamente los cierres estrictos, encerramientos casi interminables que no ha tenido ningún resultado y que ha generado situaciones más criticas en términos de salud”, es el análisis de Alfonso Goitia, economista y directivo de la Asociación de profesionales por la Transformación de El Salvador (PROES).
El economista explicó en el programa radial “Realidad a Fondo”, en Radio Maya Visión, la falsa contradicción que presenta el Gobierno entre la defensa de la salud y la economía familiar, lo que ha generado precariedad, miseria y hambre entre los sectores más vulnerables del país.
Goitia sostuvo que no ha habido un verdadero esquema sanitario para llevar salud a la población, las cuarentenas interminables han generado una crisis económica que precisamente afecta a la gente, ha provocado hambre, miseria y pobreza, lo que ha permitido que la gente salga a las calles a pedir comida con banderas blancas.
“Esto es totalmente contradictorio de que esté diciendo que está salvando vidas y lo que está provocando más bien es, ciertamente, una situación precaria y de hambruna en la gente. Lo que indica que no hay una dicotomía, sino un mal manejo de crisis sanitaria y económica del país”, dijo el economista.
Para Goitia, hay fases establecidas de la reapertura económica que ya debieron aplicarse hace mucho tiempo; sin embargo, el Gobierno se ha cerrado a que quiere una cuarentena estricta, demostrando que no hay dualidad entre buscar la salud y la economía para que no entre el país en una situación grave.
“Ha habido un mal manejo sanitario, que ha provocado una crisis. Hay una gran cantidad de muertos, muchos profesionales de la salud. Mientras que en el caso de la situación de hambre, como no se hizo una reapertura gradual… La no reapertura por un interés autoritario no ha posibilitado que el nivel de economía se vaya abriendo y mejore la situación económica de la gente y del país”, explicó.
El economista explicó que se han perdido más de 79,900 empleos desde el inicio de la pandemia, esto de acuerdo a lo que reporta el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS); empleos formales que se están perdiendo y que posiblemente pasen a la informalidad. Además, explicó que hay estudios académicos que establecen que el país perderá entre 230,000 a 300,000 empleos para este año.
Mientras que hay muchas micro, pequeñas y medianas empresas que han ido cerrando, muchas empresas están quebrando y algunas están esperando la reapertura para ver si pueden sobrevivir, aseguró Goitia.
El Salvador tiene la caída más grande de su economía con menos 8.6 % del Producto Interno Bruto (PIB), según la información de la CEPAL. “Nunca en la historia de este país habíamos llegado a ese nivel. Algunos señalan que hemos retrocedido 40 años”, dijo.
Además, explicó que la pérdida de ingresos fiscales al Estado podrían andar arriba de los 650 millones de dólares, por lo que a finales de año podrían llegar a más de 950 millones de dólares, esto de acuerdo a las proyecciones del Ministerio de Hacienda.
En cuanto a la deuda pública, será superior al 92 % del PIB; es la deuda pública más grande de todos los países de la región, sostuvo Goitia.
Las exportaciones han caído en un 25.9 % y las importaciones en menos 17.8 %. El Salvador es el país que ha caído en exportaciones, aún en los otros países en Centroamérica han reportado exportaciones positivas, afirmó.
“Estamos ante una situación que el manejo inadecuado de la pandemia en el marco económico y social están provocando una situación sumamente grave. Si en el 2019 estábamos con un 23 % de pobreza que afectaba a los hogares, este año vamos a retroceder más de 10 años. Algunos plantean que retrocederemos a 1996”, comentó.
La pobreza extrema va a incrementarse de 4.6 % al 2019, vamos a llegar a más del 12 %; otra vez hemos retrocedido lo avanzado en los últimos 10 años, agregó.
Por otra parte, Goitia señaló que el Gobierno ha mostrado una actitud de “si no me hacen caso de encerrar a la gente, pues no se abre la economía”. Mientras que los empresarios han sido los primeros que han atendido esta situación y que han pedido ir abriendo poco a poco ante esta situación de la pandemia.
“Hay una situación muy crítica y la población se verá afectada, la informalidad va a crecer ya que no hay empleos. Todas las condiciones aun los precios de bienes y servicio se están incrementando. Hay una situación muy precaria que estarían demostrando un país muy afectado. Con esto empiezan a asumir el criterio que tiene que hacer ajustes estructurales y son ajustes que vendrán a afectar a la gente con menos ingresos. Nunca antes el país había estado en esta situación. Ni siquiera en la crisis de 2009, ni en ese contexto estuvimos en esta situación. Este Gobierno hace dos meses debería de haber asumido la propuesta de emergencia de la Asamblea Legislativa, que presentaba la atención de la pandemia focalizada, una reapertura económica adecuada”, puntualizó.
