Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
Ante el desmantelamiento de diversos logros democráticos que se obtuvieron tras la firma de los Acuerdos de Paz, realizada el 16 de enero de 1992 en el Castillo de Chapultepec, México, diversos colectivos anunciaron la conmemoración del 30 aniversario de la refundación del país, el domingo 16 de enero con una concentración y marcha en San Salvador.
La Coordinadora Salvadoreña de Movimientos Populares, el Bloque de Resistencia y Rebeldía Popular, los Jueces Independientes, la MPGR y la Alianza Nacional de El Salvador en Paz, anunciaron su decisión de marchar en denuncia de las políticas del gobierno del presidente Nayib Bukele, que consideran están deteriorando las condiciones de vida de las mayorías en vulnerabilidad económica y social.
José Santos Melara, de la Alianza por un El Salvador en Paz, señaló al presidente Nayib Bukele de “despotricar” contra los Acuerdos de Paz, un logro histórico que permitió el fin de 12 años de confrontación armada, que enlutó la vida de miles de familias salvadoreñas, pero lamentó más la manipulación hecha a los veteranos de guerra, a quienes les pidieron su voto y luego los han desechado y les niegan los beneficios pactados.
“El tema de democracia, justicia social, constitucionalidad y alternancia que son centro de la democracia y que se plasmaron en los Acuerdos de Paz, pues han sido destruidos. Y si sumamos el desmantelamiento del Sistema Judicial que consolidaba la democracia en el país con las 36 reformas que se realizaron al sistema jurídico y electoral pues se perdieron”, dijo.
“Vamos a conmemorar estos 30 años de los Acuerdos de Paz, con un mensaje claro al presidente Nayib Bukele , en donde le diremos que no aceptamos que desmantele las reformas más importantes en los últimos 30 años, que marcó una nueva etapa de vida en el país”, agregó Melara.
Previo a la marcha se concentrarán en dos puntos: Parque Cuscatlán, sobre la Alameda Roosevelt, y el Palacio de los Deportes (INDES), a partir de las ocho de la mañana, luego saldrán hacia la Plaza Cívica en el Centro Histórico de San Salvador.
Sonia Urrutia del Bloque de Resistencia y Rebeldía Popular, afirmó el compromiso de dar realce a la fecha conmemorativa porque significó el cese de la represión del Estado, a través del ejército y cuerpos policiales, para dar paso a cumplir derechos como la libertad de expresión, organización y participación política de la sociedad civil en general.
“Hoy, a 30 años de los Acuerdos de Paz, esas conquistas históricas están amenazadas por el régimen dictatorial de Nayib Bukele, con retrocesos en la democracia, pérdida de libertades, persecución política, acoso a la prensa independiente y líderes religiosos”, afirmó Urrutia.
Para Verónica Guerra, integrante de la Coordinadora Salvadoreña de Movimientos Populares, argumentó que la movilización del próximo 16 de enero, será una forma de evidenciar la profundización de la crisis democrática que se ha generado en el país.
“Vamos a visibilizar todos las acciones gubernamentales que violentan los derechos de la población o sectores. Hay una crisis económica y una serie de medidas antipopulares que ha tomado este gobierno que van en detrimento de los derechos humanos de las personas más vulnerables”, dijo.
“No es posible que se mantenga el “status quo” de la nueva burguesía y otros grandes empresarios, y que sea el pueblo salvadoreño el que siga pagando los platos rotos de estas crisis, como la Ley de Agua que afectará a la población más pobre y para esto montaron un show político para desechar las propuestas de las organizaciones sociales y ambientalistas”, refirió Guerra.
Asimismo, denunciaron el montaje de un “sistema de corrupción” que solo está generando abusos de poder, impunidad en donde sobresale el “pacto con pandillas”, de este nuevo gobierno y que se evidencia en el fracaso del Plan de Control Territorial, con las desapariciones de miles de jóvenes en el país.
A esta iniciativa de marchar el próximo 16 de enero se sumó la organización de los Jueces Independientes. Juan Antonio Durán, abogado de la república, reafirmó que era imperativo reivindicar la historia y no olvidar las causas estructurales que culminaron en el conflicto armado de la década de los años ochenta, porque esas condiciones persisten en la actualidad del país.
“No podemos negar las conquistas de los Acuerdos de Paz, que terminaron con la dictadura militar y las reformas constitucionales que permitieron un camino hacia la democracia en El Salvador”, afirmó.
“Es indispensable reivindicar la memoria de las víctimas del conflicto armado tanto de los que intervinieron, los bandos beligerantes y sobre todo las víctimas de la sociedad civil, sus desaparecidos, sus víctimas, los desplazados que abonaron con su sangre y sacrificio a la paz que se pretendió construirse”, señaló Durán.
En cuanto a la paz, el juez Durán sostuvo que debe exigirse porque su significado no solo está relacionado a la ausencia de guerra, sino al convivio armonioso de la sociedad en donde se garanticen los derechos económicos, sociales, culturales y políticos de la población.
“No puede haber paz sin respeto a la Constitución y sus leyes, y no puede haber paz sin respeto al Estado de Derecho, al debido proceso y la independencia judicial y no puede haber paz sin respetar la memoria de las víctimas”, agregó.
“No puede haber paz si nos extorsionan, si hay desaparecidos, si hay violencia social y estructural.
Los Acuerdos de Paz constituyeron una forma de solucionar las diferencias antagónicas con respeto a las leyes y la institucionalidad.
Y mancillarlos y las causas del conflicto armado es desconocer nuestra historia y realidad social y el pueblo que ignora su historia se ve condenado a repetirla y no queremos eso”, puntualizó Durán.