Tel Aviv/Prensa Latina
Israel intensificó este domingo sus ataques aéreos contra diversos puntos de la Franja de Gaza, mientras se combate en zonas cercanas al enclave, casi 40 horas después de la ofensiva del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas).
Las Fuerzas Armadas de Israel (FDI) anunciaron que desde el inicio de las hostilidades bombarderon 800 objetivos en ese territorio, donde viven más de dos millones de palestinos, 120 de ellos en la norteña ciudad de Beit Hanoun.
Decenas de aviones de combate lanzaron sus misiles la tarde del domingo, en lo que las FDI calificó de “ataque masivo”. La nueva ola de bombardeos, según la prensa, fue monitoreada por el primer ministro Benjamin Netanyahu, quien llegó a las salas de control del cuartel general de la Fuerza Aérea, ubicada en la base de Kirya, en Tel Aviv, acompañado por el comandante de ese cuerpo, Tomer Bar.
Más temprano, la Media Luna Roja Palestina acusó a Israel de atacar al menos 34 objetivos civiles allí. Por su parte, el vocero de la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina, Adnan Abu Hasna, anunció que más de 20 mil 300 personas abandonaron sus hogares en el enclave costero y se refugiaron en instalaciones del organismo en las últimas 24 horas.
En tanto, el Ministerio de Dotaciones y Asuntos Religiosos criticó el bombardeo israelí contras dos mezquitas, ubicadas en el oeste y el sur de la Franja, lo cual, dijo, es una violación de las normas internacionales.
En territorio israelí, el portavoz de las FDI, general Daniel Hagari, informó que en la tarde de este domingo continúan combates en varias zonas entre los soldados y milicianos de Hamas.
Mientras, el portal noticioso Walla reportó choques en el kibutz (granja agrícola) de Bari y en el poblado de Otaf, donde se infiltraron ayer los combatientes del grupo armado palestino.
El gabinete de seguridad israelí anunció este domingo la declaración oficial del “estado de guerra”, que abre las puertas a una ofensiva a gran escalada contra la Franja. La decisión se aprobó tras la operación de Hamas, cuyo brazo armado, las Brigadas Al Qassam, lanzaron miles de cohetes contra el país y luego iniciaron una ofensiva terrestre que tomó por total sorpresa al Ejército y a los estamentos de seguridad.
El Ministerio de Salud israelí reportó 657 muertos y unos dos mil heridos, incluidos 57 uniformados, 31 policías y cinco miembros o veteranos del Shin Bet (Agencia de Seguridad Nacional).
Las autoridades de salud de Gaza informaron, por su parte, que 370 personas murieron allí y más de mil 788 resultaron heridas, aunque la cifra es muy superior, pues Israel informó que mató a más de “400 terroristas”, como califica a los milicianos.