Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
Más de 130 pandilleros fueron condenados por el Tribunal 5° contra el Crimen Organizado, de San Salvador, luego de habérseles comprobado que fueron responsables de diversos asesinatos en el país.
Uno de los pandilleros al que se le impuso mayor pena de prisión fue Nelson Alberto Durán Delgado, alias “El Chato”, palabrero de la Comunidad “29 de Agosto”; fue condenado a 224 años de prisión por siete homicidios agravados y agrupaciones ilícitas.
También recibieron penas significativas Mauricio Ernesto Catalán Munguía, alias “El Popeye”, y Mario Ricardo Díaz Romero, alias el “Little Gasper”, con 215 años de cárcel cada uno. Josué Eduardo Pérez, alias “El Guayo”, fue condenado a 125 años. Todos eran miembros activos de una pandilla.
La estructura delictiva, operando en más de 16 colonias de la capital, entre ellas la colonia Dolores, Costa Rica, San Patricio, IVU, fue responsable de 13 homicidios y 2 feminicidios entre 2006 y 2018. Se destacan casos donde utilizaron piedras y martillos para golpear a sus víctimas hasta causarles la muerte, según informó Centros Judiciales.
Entre las víctimas se encuentran una pareja de esposos de 60 años, asesinados porque la pandilla creía que los delataban como informantes. Las investigaciones revelaron la brutalidad de sus métodos, evidenciando un alto nivel de violencia. Además de las condenas para los pandilleros, se impusieron penas de 3 años para “civiles” que colaboraban con la pandilla.
En otro caso judicial, el Tribunal Segundo de Sentencia de Santa Ana llevó a cabo la vista pública contra Wilfredo Salguero Landaverde, acusado por la Fiscalía General de la República como cómplice no necesario, pues durante la madrugada del 23 de octubre de 2020, un grupo de personas se dirigía a sus labores diarias cuando tres individuos vestidos de negro los interceptaron. En el ataque, las hermanas Consuelo del Carmen y Gladis Rosa Argueta Canales perdieron la vida. En ese atraco se encontraba Salguero Landaverde, a este se le señala como la persona que condujo la motocicleta utilizada por el autor de los disparos para huir del lugar.
Tras el proceso judicial, el juez emitió un fallo condenatorio contra Salguero Landaverde por el delito de homicidio, imponiéndole una pena de 33 años y cuatro meses de prisión.
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