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Tegucigalpa / Prensa Latina
Un total de 247 mil 90 personas dejaron sus hogares de 2014 a 2018 por la violencia o las pandillas en Honduras, reveló el informe de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
El documento, titulado ‘Caracterización del desplazamiento interno por violencia en Honduras 2004-2018’, elaborado también por la Secretaría de Derechos Humanos, analiza las causas de ese desplazamiento forzado y alerta sobre la necesidad de legislaciones en el país centroamericano para proteger a esas personas.
Precisó el estudio que de esa cifra, 191 mil desplazados (77 por ciento) abandonaron sus lugares de residencia por violaciones de derechos humanos y más de 56 mil nacieron o se incorporaron a los hogares afectados después del desplazamiento.
Asimismo, el 55 por ciento de los encuestados reconoció el desplazamiento forzado por amenazas de muerte, asesinatos de familiares (40 por ciento), extorsión (13 por ciento), reclutamiento de niños y adolescentes por bandas del crimen organizado (tres por ciento).
El representante de Acnur en Honduras, Andrés Celis, destacó la poca visibilidad de ese fenómeno, identificado también por el gobierno, pero poco analizado su impacto en la sociedad.
Celis manifestó preocupación por la falta de debate en el Parlamento de un proyecto de ley presentado en marzo pasado por la Comisión Interinstitucional para la Protección de Personas Desplazadas por la Violencia, que busca prevenir, atender y proteger a ese sector poblacional.
En la misma línea se pronunció la ministra hondureña de Derechos Humanos, Karla Cueva, quien aseguró que el estudio permitirá entender el fenómeno del desplazamiento forzado dentro del país y, a su juicio, el gran reto es prevenir la violencia contra las mujeres y otros tipos de crímenes.
