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Los firmantes del texto advirtieron que las acciones del mandatario republicano con respecto a Ucrania son una ‘profunda preocupación de seguridad nacional’ y por eso apoyan la pesquisa emprendida en el Capitolio, con el fin de que se determinen los hechos.
Para ser claros, no deseamos prejuzgar la totalidad de los hechos o el proceso deliberativo del Congreso. Al mismo tiempo, no se puede negar que lo que ya sabemos es lo suficientemente grave como para merecer procedimientos de juicio político, manifestaron.
A partir de ahí, los hechos, y nada más que los hechos, deberían dictar cómo el Congreso responsabiliza al presidente y le indica al mundo que nuestra política exterior y seguridad nacional no están a la venta, añadieron los signatarios de la declaración.
De acuerdo con el diario The Washington Post, la recolección de firmas fue puesta en marcha por National Security Action, una organización fundada y en gran parte integrada por exfuncionarios de la administración del demócrata Barack Obama (2009-2017) para llamar la atención sobre el ‘liderazgo imprudente’ de Trump.
Muchos de los firmantes son exmiembros de ese Gobierno, pero la lista comprende a otros que sirvieron en administraciones republicanas como las de George H.W. Bush (1989-1993) y George W. Bush (2001-2009).
Como profesionales de la seguridad nacional, muchos de nosotros hemos estado preocupados por las acciones del presidente Trump y sus implicaciones para nuestra seguridad. Algunos hemos hablado, pero muchos hemos evitado la política a lo largo de nuestras carreras y, como resultado, no hemos intervenido públicamente, indicaron.
Sin embargo, añadió el texto, las revelaciones de los últimos días exigen una respuesta. El presidente Trump parece haber aprovechado la autoridad y los recursos de la oficina más alta del país para invitar a la interferencia extranjera adicional en nuestros procesos democráticos.
El martes último la Cámara de Representantes lanzó una investigación de impeachment contra el jefe de Estado a raíz de una llamada telefónica en la que Trump le pidió a su par ucraniano, Volodymyr Zelensky, realizar una pesquisa vinculada con el exvicemandatario y candidato presidencial demócrata norteamericano Joe Biden.
La decisión de dar ese paso también estuvo motivada por la queja que emitió por un denunciante de la comunidad de inteligencia acerca de las interacciones del gobernante estadounidense con Ucrania, vistas por los demócratas como un intento de presionar a un país extranjero para atacar a un oponente político.
