Buenos Aires/PL
Trabajadores de Fabricaciones Militares (FM) de Argentina se concentraron el viernes ante la puerta de la sede central de esa empresa estatal para protestar contra los recientes despidos y reclamar la reincorporación de los echados.
FM no escapa a la política laboral del gobierno de Mauricio Macri de achicar el Estado y despedir a quienes ve como los más fuertes opositores entre los empleados públicos; por lo que la nueva administración de esa empresa cesanteó a unos 140 profesionales.
Se sumaron así a los más de 22 mil despedidos en los últimos 40 días de dependencias nacionales, drugstore provinciales y municipales.
En el caso de FM se trata de ingenieros químicos y mecánicos, no rx sociólogos, economistas y administrativos, quienes quedaron en la calle sin previo aviso.
Facundo Doval, economista que se desempeñaba en el área de Planeamiento de Control y Gestión, explicó al informativo Infonews que, a pesar de lo que había prometido la nueva administración, no hubo en FM ningún tipo de entrevista evaluativa previa al despido.
Doval señaló que «desmantelaron áreas enteras de la empresa. Plantearon que no son necesarias. Quieren que Fabricaciones Militares sólo se dedique a hacer balas», contó el economista despedido.
Entre otras producciones, FM tenía hasta ahora programas de fabricación de balas, chalecos para las fuerzas de seguridad, vagones para el ferrocarril Belgrano Cargas, radares y productos para la industria minera y la metal mecánica.
Con el apoyo del sindicato del sector, los trabajadores despedidos convocaron para este viernes a las 17:00 hora local a la entrada de la sede central de FM la charla «Defender la ciencia y la tecnología es defender la industria nacional».
Entre los oradores estarán científicos de la talla de Jorge Aliaga (doctor en Física, exdecano de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires -UBA) y Enrique Martínez (expresidente del Instituto Nacional de Tecnología Industrial y exdecano de Ingeniería de la UBA).
Por otro lado, los gremios docentes de la provincia de Buenos Aires y de la ciudad de Buenos Aires, los dos distritos educacionales más grandes del país, rechazaron las ofertas de aumentos salariales del 22 y 23,6 por ciento hechas por sus respectivos gobiernos.
Ante el alza de la carestía de la vida, los sindicatos de maestros reclaman un incremento del 35 al 40 por ciento, por lo que las negociaciones por el nuevo contrato laboral entre las autoridades y los sindicatos se pronostican tensas.
Crecen las quejas y reclamos por los más de mil despidos en el Ministerio de Salud cuando el país afronta una epidemia de dengue.
Gremios de esa área alertaron que la dependencia se encuentra casi paralizada, ya que mil trabajadores y trabajadoras se hallan sin poder desempeñar sus tareas y sin garantías sobre la continuidad de los programas y de sus fuentes de empleo.