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Ex presidente Mauricio Funes afirma que durante su gobierno Embajada de Estados Unidos presionaba para “descabezar” gabinete de seguridad.
Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
El ex presidente de la República Mauricio Funes aseguró que la Fiscalía General de la República (FGR) está influenciada por la Embajada de Estados Unidos en El Salvador. Injerencia que durante su mandato no permitió avanzara.
Funes, desde las redes sociales, afirmó: “hace unos días me enteré que los vehículos blindados en los que se moviliza el fiscal general y personal de confianza son alquilados a una empresa de transporte salvadoreña. Lo curioso es que la factura mensual la paga la Embajada USA ¿No será esta una forma de influir en la FGR?”.
De igual manera, el ex funcionario dijo que los cambios realizados por el fiscal general Douglas Meléndez en la institución fueron ordenados por la Embajada de Estados Unidos. “No es extraño entonces que agentes del FBI (principal rama de investigación de Estados Unidos) interfieran en las investigaciones y hasta amenazan a testigos para criteriarse”, agregó.
El ex presidente dijo que conoce el caso de un empresario que miembros del Buró Federal de Investigaciones (FBI) le han visitado varias veces en su oficina y le han amenazado para que se criterie e incrimine a otros empresarios que a juicio de Estados Unidos deben de estar en prisión. “Como el empresario no ha aceptado la presión, le han cancelado la visa y permisos de importación”, aseguró Funes.
El exmandatario pidió que la Asamblea Legislativa audite los procedimientos de investigación de la FGR y la intervención de un gobierno extranjero en procesos judiciales.
“Una embajada puede cooperar pero no interferir abusivamente y amenazar a testigos que si no se criterian serán acusados penalmente”, denunció.
Finalmente, el ex mandatario aseguró que en su gobierno la embajada estadounidense intentó presionarle con quitar la ayuda a la Policía Nacional Civil (PNC) si no “descabezaba” el gabinete de seguridad. Sin embargo, no aclaró bajo el mandato de quién se encontraba el gabinete de seguridad que Estados Unidos no aceptaba.
“Nunca acepté presiones. La PNC y FGR deberían evitar las intervenciones abusivas de esta embajada y tener más dignidad frente a la cooperación internacional”, sugirió.
