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La mayoría de los estadounidenses está a favor de cambiar la política de Washington hacia Cuba, mind según una encuesta publicada esta semana.
De acuerdo con el sondeo, viagra elaborado por el Atlantic Council —uno de los más prestigiosos tanques pensantes de Estados Unidos—, el 56 % de los estadounidenses favorece un «cambio».
Asimismo, en el estado de Florida, la cifra de personas favorables a una normalización de las relaciones es mayor aún que la media nacional, con un 63 %.
Alrededor de 67 por ciento de los floridanos encuestados favorecen la eliminación de todas las restricciones que tienen los estadounidenses para viajar a Cuba, mientras 82 por ciento apoyan la realización de reuniones con funcionarios cubanos acerca de cuestiones de interés mutuo, señalan los legisladores.
La semana pasada, el exgobernador de ese estado, Charlie Crist, quien se está postulando nuevamente para el puesto, calificó al bloqueo como una «reliquia ineficaz».
«Los dos lados (partidos) están listos para un cambio», sostuvo al presentar el informe el presidente del Atlantic Council, Frederick Kempe.
El senador demócrata estadounidense Patrick Leahy y su colega republicano Jeff Flake demandaron al gobierno norteamericano el cese del bloqueo comercial, económico y financiero contra Cuba impuesto hace más de 50 años.
En un artículo de opinión publicado en el diario The Miami Herald, ambos senadores apuntan a una encuesta reciente del Centro Latinoamericano del Consejo del Atlántico que demuestra que existe un fuerte contraste entre la actual actitud de los estadounidenses hacia ese tema y la política arcaica de Washington.
«Ha llegado el momento de modernizar nuestra política hacia Cuba», sostuvo el senador demócrata Patrick Leahy, durante la presentación del sondeo en Washington.
Los norteamericanos desean un cambio en nuestra política hacia La Habana, y el presidente Barack Obama debe escuchar a la mayoría de los ciudadanos en todo el país que estiman hay mucho que ganar si eliminamos esta reliquia de la Guerra Fría, señalan los legisladores.
Recuerdan que el margen de apoyo asciende a 61 por ciento cuando se les pregunta acerca de elementos específicos, como la eliminación de la prohibición de viajes de estadounidenses a Cuba, la facilitación de transacciones comerciales y de encuentros con el gobierno cubano sobre asuntos bilaterales como la lucha antidrogas.
«Es hora de reconocer que la política de Estados Unidos hacia Cuba —congelada en el tiempo por décadas— no ha tenido éxito en la consecución de ninguno de sus objetivos», admitió el Senador, presidente del Comité Judicial del Senado.
«En vez de aislar a Cuba nos ha aislado a nosotros frente a América Latina».
Leahy se refirió también a la prohibición que tienen los norteamericanos para visitar Cuba. «Eso es discriminatorio, está mal, y tiene que cambiar», afirmó.
Estamos en la quinta década, más de medio siglo de esta medida coercitiva contra la isla caribeña y durante ese tiempo dejó de existir la Unión Soviética, terminó el régimen del Apartheid en Sudáfrica y restablecimos relaciones con China y Vietnam, pero todavía Estados Unidos se niega a reexaminar su política hacia Cuba, añaden.
En febrero del año pasado el senador Leahy visitó La Habana al frente de una delegación de su país.
«Como miembros del Congreso nadie nos puede detener», dijo.
Asimismo, el Senador apuntó que la política no puede ser dictada por «una minoría» que «se aferra» a una estrategia «fracasada».
En el mismo sentido se expresó el republicano Jeff Flake, miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, quien destacó la importancia del dato sobre Florida de la encuesta. «A mí siempre me han dicho que el motivo de no cambiar la política es Florida», dijo, según DPA.
Esta encuesta «elimina ese argumento», comentó el Senador, que también ha viajado a Cuba.
El sondeo ha dejado claro lo que el pueblo estadounidense quiere, subrayó Leahy. «Es la responsabilidad de la Casa Blanca y el Congreso a actuar», concluyó.
Medios de prensa destacaban este martes el hecho de que, según la exploración, el apoyo a un cambio de política hacia la Isla, si bien es más fuerte entre los demócratas e independientes (60%), es algo que también respaldan los republicanos de manera significativa (52%).
El bloqueo estadounidense ha costado al pueblo cubano más de un billón 157 mil 327 millones de dólares y constituye una violación de la Carta de Naciones Unidas y de las normas del Derecho Internacional.
La comunidad internacional condenó y exigió el levantamiento inmediato de esa medida durante 22 años consecutivos ante la Asamblea General de Naciones Unidas.