Yaneth Estrada
@caricheop
A través de un comunicado de prensa, Médicos Sin Fronteras (MSF) confirmó que reanudan actividades en El Salvador, “tras habernos visto obligados a suspender temporalmente nuestro trabajo debido al ataque hacia un equipo de ambulancias en Reparto Las Cañas (Ilopango) el domingo 31 de enero, por parte de un grupo armado”.
“En esta suspensión de 21 días, hemos esclarecido detalles de manera independiente sobre lo ocurrido y hemos reforzado con las comunidades en su totalidad que los equipos médicos deben ser respetados y de que operamos con neutralidad, imparcialidad e independencia”, señalan.
“MSF es una organización de acción médico-humanitaria: asistimos a personas amenazadas por conflictos armados, violencia, epidemias o enfermedades olvidadas, desastres naturales y exclusión de la atención médica. La acción humanitaria es un gesto solidario de sociedad civil a sociedad civil, de persona a persona, cuya finalidad es preservar la vida y aliviar el sufrimiento de otros seres humanos: esta es nuestra razón de ser”, dice la entidad.
Además, deben su independencia financiera a los más de seis millones de personas y entidades privadas que son socias o colaboradoras de MSF en todo el mundo. “Gracias a ellas, nosotros decidimos a quién atendemos y cómo, y nuestro único interés es el de las poblaciones a las que asistimos. Con el fin de mejorar su situación, también podemos prestar testimonio para denunciar las situaciones que presenciamos. Pero no aspiramos a transformar una sociedad, sino a permitirle superar un periodo crítico: nuestro objetivo son las personas, no los Estados. Por este motivo, nuestras intervenciones son limitadas en el tiempo.
El incidente
El domingo 31 de enero a las 3:07 de la madrugada un grupo armado atacó una ambulancia en la que se transportaba un equipo de MSF conformado por un médico y un auxiliar de enfermería y el conductor, quienes fueron detenidos al llegar al Reparto Las Cañas adonde se dirigían luego de recibir una llamada urgente.
Los ocupantes de la ambulancia fueron obligados a bajar del vehículo, interrogados, amenazados y agredidos. Tras lograr zafarse de sus asaltantes y una vez a salvo, recibieron atención médica por heridas leves y contusiones y están recibiendo atención psicológica
MSF recordó que, como organización médico-humanitaria, “operamos bajo los principios de neutralidad, imparcialidad e independencia e insistimos en nuestro llamamiento para que para que los grupos armados respeten los servicios médicos”.