Berlín / AFP
La canciller alemana, Angela Merkel, insistió el martes que no va a sacrificar las partidas destinadas a la ayuda al desarrollo para aumentar los gastos militares, ignorando una vez más las críticas de Washington a su presupuesto de defensa.
«Seguiremos con nuestro esfuerzo (en materia de gastos militares) pero no si ello cuesta a la ayuda al desarrollo», dijo en el foro «Global Solutions» en Berlín.
«Que el presidente estadounidense (Donald Trump) lo considere insuficiente, puedo entenderlo. Muchos socios europeos también lo consideran», dijo.
Un poco antes, el embajador de Estados Unidos en Berlín, Richard Grenell, había estimado «inquietante» que el gobierno alemán trabaje en cómo reducir el nivel «ya inaceptable» de sus gastos militares.
Berlín, como todos los miembros europeos de la OTAN, prometió en 2014 acercarse lo más posible en diez año a un 2% del PIB de gastos en defensa. Alemania se fijó un objetivo de 1,5% en 2025.
Pero esta partida pasará de 1,37% en 2020 a 1,25% en 2023, según la planificación del presupuesto 2019-2023.
Alemania argumenta desde hace mucho que la ayuda al desarrollo es un factor importante para garantizar la seguridad y la estabilidad internacional, y que los gastos militares no deben ser los únicos que se tomen en cuenta.
Pero la impaciencia de Donald Trump sobre el tema alimenta el temor a una reducción del compromiso estadounidense en la OTAN.
Estados Unidos destinó a gastos de defensa en 2018 unos 650.000 millones de dólares, el país que más destina a esta cartera. Los países europeos de la OTAN suman un gasto militar de 250.000 millones, según un estudio publicado en febrero por el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS).
El aumento de los gastos en defensa de Estados Unidos de 2017 a 2018 de unos 45.000 millones de dólares, representa casi el equivalente del presupuesto total de defensa de Alemania, según el IISS.
– Embajador non grato –
El vicepresidente del Parlamento de Alemania, Wolfgang Kubicki, ha solicitado que el Ministerio de Exteriores germano declare ‘persona non grata’ al embajador de Estados Unidos en su país, Richard Grenell, después de que expresara su desaprobación hacia el presupuesto federal alemán, informa la agencia AFP.
«Si un diplomático estadounidense actúa como un alto comisario de una potencia ocupante, tendrá que aprender que nuestra tolerancia tiene sus límites», ha expresado ese político alemán, quien considera inaceptable que el diplomático norteamericano intervenga en los asuntos de Berlín.
Todo comenzó cuando la cuenta oficial en Twitter de la Embajada de Estados Unidos en Alemania citara unas declaraciones de Grenell, quien habría dicho que la reducción de las obligaciones de defensa por parte de ese país europeo es una señal preocupante para sus aliados en la OTAN.