Por Karim Talbi
Moscú/AFP
El presidente francés, here François Hollande, treatment y la canciller alemana, Angela Merkel, son esperados este viernes en el Kremlin para exponer al presidente Vladimir Putin un nuevo plan de paz elaborado con urgencia ante la intensificación de los combates en el este de Ucrania.
La iniciativa franco-alemana, respaldada por Estados Unidos y la Unión Europea, tiene todos los ingredientes de una última oportunidad tras diez meses de conflicto que ha dejado más de 5.300 muertos y provocado una crisis internacional que recuerda las crispaciones Este-Oeste de la Guerra Fría.
Antes de volar a Moscú, los dirigentes europeos expusieron al presidente ucraniano, Petro Poroshenko, este plan anunciado por sorpresa el jueves en la conferencia de prensa ofrecida en París por el presidente Hollande.
La presidencia ucraniana indicó por la noche, tras varias horas de negociaciones entre los tres dirigentes, que su iniciativa «permite esperar un alto el fuego» cuando los bombardeos y combates han dejado cientos de muertos, la mayoría civiles.
Poroshenko subrayó que todas las partes deben respetar los acuerdos de paz firmados en Minsk en septiembre, los únicos hasta ahora firmados por ucranianos y rebeldes prorrusos, que las últimas semanas suman victorias militares.
En realidad, el plan de paz es más bien una «contrapropuesta» de plan de paz porque Putin sometió unas ideas días atrás, según varias fuentes, a Merkel y Hollande, que las comunicaron el miércoles a Estados Unidos y Ucrania antes de preparar unas contrapropuestas.
Esta «nueva propuesta de solución del conflicto» garantiza «la integridad territorial de Ucrania», aseguró el presidente francés y advirtió de que los rusos tienen el tiempo contado y «la opción de la diplomacia no se puede prolongar de manera indefinida».
Según informaciones publicadas en la noche por el diario alemán Süddeutsche Zeitung, pero desmentidas por el gobierno, el plan consistiría en «concluir un cese del fuego inmediato» a cambio de una «autonomía más grande acordada a los separatistas, en un territorio más vasto que el contemplado hasta ahora».
«A Poroshenko, se le quiere hacer comprender que se trata de la última posibilidad ofrecida a Ucrania de evitar una derrota militar y el hundimiento económico», según SZ.
Un alto responsable ucraniano también desmintió la veracidad de las informaciones de SZ.
Obama se reserva respuesta sobre las armas
Paralelamente a la propuesta presentada por Alemania y Francia, Estados Unidos seguía sopesando la posibilidad de suministrar armas al ejército ucraniano, que acumula los reveses en las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk.
Ahora bien, de visita en Kiev, el secretario norteamericano de Estado, John Kerry dijo claramente que «la primera opción obviamente es resolver la cuestión a través de la diplomacia».
Dara dar un vuelco a la situación, el ejército ucraniano necesita «instrumentos de comunicación, de interferencia electrónica, o radares», según Kiev, drones, cohetes antitanque, según un informe independiente reciente redactada por varios grupos estadounidense de reflexión.
«El presidente tomará su decisión espero que pronto», dijo en Kiev el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, en referencia a posibilidad de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, proporcione armas al gobierno de Ucrania para luchar contra los rebeldes prorrusos en Donetsk y Lugansk.
Sin embargo
El presidente Petro Poroshenko recibió al presidente francés y la canciller alemana, sin que se filtrara el contenido de la reunión y después de que se anulara la publicación de una declaración conjunta.
«Partiremos a Kiev esta tarde, haremos una nueva propuesta de solución sobre el conflicto, que se basará en la integridad territorial de Ucrania, e iremos a discutirla con el presidente Poroshenko y el viernes en Moscú con el presidente ruso», Vladimir Putin, dijo Hollande antes del viaje.
El presidente francés advirtió al mismo tiempo que la opción diplomática «no puede prolongarse indefinidamente».
«En Ucrania hay una guerra. Se utilizan armas pesadas, todos los días mueren civiles», dijo Hollande, recordando que Francia y Alemania llevan «la iniciativa» desde hace meses para tratar de favorecer una solución negociada en Ucrania.
Pero una respuesta positiva de los estadounidenses podría ser interpretada por Moscú como un «casus belli» de Washington, y agravar más las relaciones ruso-estadounidenses, que pasan por su peor crisis desde la Guerra Fría.
El anuncio del refuerzo de la presencia de la OTAN en su flanco oriental con la creación de una nueva fuerza de reacción de 5.000 hombres y seis «centros de mando» tampoco agrada a Moscú.
Los responsables diplomáticos de Rusia y Estados Unidos, Serguei Lavrov y John Kerry, se encontrarán el sábado en la conferencia de Múnich sobre seguridad.
John Kerry expresó su creencia de Vladimir Putin todavía puede apostar por la distensión e instó al presidente ruso a «optar por acabar con esta guerra».