MEXICO/Xinhua
Los gobiernos de México y Estados Unidos anunciaron este viernes el inicio de un “nuevo capítulo” en materia de seguridad y de combate al crimen organizado, con el cual se busca enmendar los esfuerzos fallidos del pasado.
Al concluir el “Diálogo de Alto Nivel de Seguridad”, representantes de ambos países acordaron el fin de la Iniciativa Mérida y el comienzo de una nueva alianza en materia de seguridad y combate al crimen organizado llamada “Entendimiento Bicentenario”.
El canciller mexicano de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, explicó en una rueda de prensa para presentar las conclusiones, que la diferencia central entre ambos programas se refiere a que la Iniciativa Mérida solo estaba concentrada en la captura en México de los grandes capos del narcotráfico, con respaldo estadounidense.
“Hoy en día lo que hay es una estrategia común que es más compleja que eso, ya vimos que no va ser suficiente si sólo capturamos capos”, dijo.
“Tenemos que preocuparnos porque no aumenten las adicciones, los jóvenes deberían tener oportunidades de trabajo porque si no, es fácil que los reclute la delincuencia”, agregó el canciller tras el encuentro en la Ciudad de México.
El diálogo bilateral terminó también con una declaración conjunta, cuyos puntos centrales se refieren a la protección de la población en materia de salud pública, en prevenir la delincuencia transfronteriza asegurando modos de viaje y comercio y reduciendo el tráfico de armas, y al desmantelamiento de redes criminales.
La delegación estadounidense estuvo representada por el secretario de Estado, Antony Blinken y el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, entre otros funcionarios.
En la rueda de prensa, Blinken reconoció que México y Estados Unidos enfrentan una situación “compleja” en materia de seguridad, con varios retos por delante en el “nuevo capítulo” por iniciar con “responsabilidad compartida”.
Ambas naciones se han enfrentado a la adicción de sustancias, la violencia con armas de fuego, las drogas ilegales, las armas, la trata y el contrabando de personas, así como al crimen organizado. La Iniciativa Mérida fue iniciada por Estados Unidos en 2008, bajo el gobierno del entonces presidente George W. Bush, y se enmarca en la política de lucha frontal contra el narcotráfico lanzada por el ex presidente mexicano, Felipe Calderón (2006-2012).
Sin embargo, el consumo de drogas al igual que la violencia y el narcotráfico aumentaron en los años de la Iniciativa Mérida, tanto en México como en Estados Unidos, de acuerdo con los expertos.