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Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
El enviado especial del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ricardo Zúñiga, y su comitiva, visitaron el Centro de Recepción para Personas Migrantes Retornadas, en donde conocieron los esfuerzos conjuntos e integrales que se realizan en El Salvador para abordar las causas principales de la migración irregular.
En su comitiva le acompañaron el encargado de Negocios, Brendan O´Brien y la canciller Alexandra Hill. Esta fue su última visita de Zúñiga antes de su retorno a Washington.
En pláticas con la canciller Tinoco, donde abordaron el tema de la migración irregular, todos coincidieron en la necesidad de mejorar la situación económica y de seguridad para que los salvadoreños no se sientan obligados a emprender un viaje en vano en busca de mejores oportunidades.
Antes se reunió con representantes de diversas organizaciones de la sociedad civil, ya que según aseguraron los funcionarios estadounidenses, son un sector clave, porque son los que están más cerca de la población salvadoreña.
Zúñiga también se reunió con representantes del sector privado del país, para abordar el tema de la economía y sobre cómo están impulsando la recuperación económica en El Salvador y creando empleos. Según manifestaron, la participación del empresariado es clave en la estrategia de EE.UU para ayudar a los salvadoreños a construir un mejor futuro.
El enviado especial para la región conversó también con periodistas salvadoreños sobre la libertad de prensa en el país, quien dijo que “la administración de Biden apoya firmemente el desarrollo y ejercicio de una prensa libre e independiente, porque es la base de cualquier democracia”, según reza un tuit del encargado de negocios, Brendan O’ Brien.
La agenda del enviado especial Zúñiga tuvo como tema prioritario para la administración Biden sostener un encuentro con miembros del Grupo de Trabajo Interinstitucional Anticorrupción de El Salvador (GTIAC). Esas instituciones son clave para combatir el flagelo de la corrupción, según dijeron las autoridades norteamericanas. Dentro de esta reunión estuvieron presentes, el fiscal general de la República, el presidente de la Corte de Cuentas de la República, y de la Corte Suprema de Justicia, así como de la Procuraduría General de la República.
Sin embargo, Ricardo Zúñiga no conversó con el presidente de la República, Nayib Bukele (al menos hasta el cierre de esta nota). De acuerdo con Roberto Valencia, en un artículo publicado en el The Washingto Post, de Estados Unidos, el presidente Bukele se negó reunirse con Zúñiga, en respuesta al desaire que el gobierno de Biden le hizo a Bukele en enero pasado.
La no conversación con Nayib Bukele se puede deber a dos teorías que los mismos salvadoreños han interpretado. La primera es que el enviado especial para la región no quiso reunirse con Bukele por los múltiples señalamientos que este ha tenido en tema de corrupción durante su pequeña instancia en el Ejecutivo. La segunda es que Nayib Bukele no quiso reunirse con él, a raíz que funcionarios de los Estados Unidos no le abrieron las puertas para reunirse con él, a principio de este año.
