Mirna Jiménez
Diario Co Latino
Tras confirmar la autenticidad de una carta firmada por las pandillas, viagra proponiéndo diálogo al Gobierno, Raúl Mijango, exmediador de la tregua entre estos grupos, manifestó que hay sectores interesados en mantener los altos niveles de violencia.
Mijango confirmó que la carta firmada por los cabecillas de pandillas fue entregada en junio pasado a la Comisión Nacional de Seguridad Pública y Convivencia, como un documento privado, por lo cual él habría respetado la decisión de estos grupos al no divulgarla.
No obstante, la carta fue hecha pública este miércoles por el periodista Paolo Louers. Entrevistado en el programa Debate de Canal 35, Mijango insistió en que no existe otra salida al problema de violencia más que el diálogo con estos grupos al margen de la ley, y que hasta ahora todos los caminos que se han seguido fueron equivocados.
“El conocimiento que tengo de la carta es porque fui uno de los cuales se les entregó copia, para efecto de hacer constar que se había entregado. Ha sido Paolo Luers el que lo ha hecho público. Lo que yo sé es que es auténtica y no me extraña porque lo que expresa es reiterar una voluntad que de manera sistemática han venido expresando las pandillas”, afirmó Mijango.
En su opinión, existen mucha resistencia de algunos grupos que están sacando ganancia de la violencia por lo cual no quieren buscar una solución real, para el exguerrillero, no hay otra solución, ya que estos son grupos irregulares difíciles de vencer y que hoy se estima que existen 70 mil pandilleros y cerca de 700 estructuras a nivel nacional.
“Aquí hay un montón de gente interesada en que esto no se resuelva.
A mí por eso ni me ofende que algunos se expresen de manera peyorativa al proceso de tregua, que se nieguen a que se busque una salida, porque en el fondo prefieren que el país siga metido en está violencia porque de hecho genera muchas ganancias”, argumentó.
Hay empresas que cobran una factura anual que suma más de $700 millones al país por la venta de seguridad privada.
“Este asunto es un tremendo negocio, habría que preguntarse: ¿Qué hago yo oponiéndome a que se resuelva esta situación?”, citó.
Mijango dijo que es importante señalar que el error de haber regresado al penal de Máxima Seguridad de Zacatecoluca a los cabecillas de maras que impulsaron “la tregua” ha generado que mandos medios dentro de las estructuras pandilleriles hayan tomado el control de dichos grupos y estos no están por el diálogo.
Esta guerra del Estado contra las pandillas puede generar la unificación de estos grupos advirtió. En el mundillo de las pandillas, reveló Migango, los cabecillas están hablando ya de crear una especie de federación de todas las estructuras de pandillas, a la que bautizarían como 503, para enfrentar al Gobierno. “Es decir, que llegará un momento en que las pandillas podrían unirse y lo que quede es una especie de confrontación más cualificada, aunque tal vez los muertos sean menos”, dijo.
Durante el espacio de la entrevista, Mijango recibió una lluvia de críticas por parte de los televidentes, quienes lo acusaron de meter miedo a la población y de estar a favor de estos grupos delincuenciales.
A todo esto, el exdirigente político respondió que el problema no es él, sino las pandillas y que él se mete en este tema porque ha tenido la ventaja de conocer las interioridades de las maras y sabe que la solución es el diálogo, y que la tregua que se hizo dejó resultados satisfactorios nunca antes visto.
“Hay que despojarnos de falsos moralismo, el Estado negocia permanentemente con criminales y lo hace a través de la Fiscalía que está facultada para eso. ¿Qué es lo que ofrece la Fiscalía con esos criterios de oportunidad para esclarecer un caso?, negociar por un caso y no digamos para parar este conflicto que está sangrando todo el país”, argumentó.
Ejemplificó que en Colombia se creó un marco legal para poder terminar con acciones delictivas, por lo que se puede hacer algo similar en el país, sugirió Mijango tras considerar que no aceptar la realidad que vive el país es maniatarse.
Mijango dijo que si el gobierno se enreda en impulsar un diálogo, sugirió que lo hagan a través de las iglesias u otras instituciones, pero que el punto es resolver y poner un “torniquete”, para parar el sangramiento del país y recuperar los niveles de convivencia y el tejido social.
En consecuencia, no se trata de comenzar a buscar culpables porque la lista sería grande, afirma Mijango.
Para él, hay una relidad que es grave y que nadie quisiera que fuera así, pero que lo importante es ver cómo se resuelve.
Según el exdiputado, a pesar de que no es un conflicto armado basado en diferencias ideológicas, sí es una guerra, y, por tanto, hay que dialogar, igual que se hizo con la guerra civil, aún cuando las motivaciones de estos grupos sean diferentes.
Mijango aseguró que él es un espectador crítico de lo que pasa, por lo que se ha atrevido a formular propuestas y considera que se está analizando de manera equivocada lo que él representa y su rol dentro de esta problemática.
Asimismo, consideró que la baja de homicidios podría constituir un proceso natural, como sucede en cualquier guerra y luego actuar como más fuerza.