Oscar López
@OscarCoLatino
El Ministerio de Educación (MINED) presentó un balance de inversión en infraestructura escolar ejecutada en el 2018. La cartera de Estado invirtió más de $18 millones en obras de infraestructura y mobiliario de 438 centros educativos del país.
Con la intervención en la mejora de la infraestructura de los centros escolares se benefició de manera directa a 215 mil alumnos de todos los niveles educativos. El MINED informó que se transfirieron $4 millones 381 mil del “Plan 10: proyecto mejorando espacios escolares para los aprendizajes y convivencia”, con lo que se intervinieron 344 centros educativos.
Francisco Castaneda, viceministro de Educación, comentó: “estamos cerrando un año con mucha inversión en infraestructura en los tres frentes que estamos viendo del problema histórico de la infraestructura”.
El funcionario detalló que uno de los aspectos importantes para la intervención en infraestructura es la legalización de los inmuebles en los que están construidos los centros escolares, ya que en muchos casos son propiedad de otras instituciones del Estado o de privados.
“Estamos cerrando con más del 60 % de las escuelas públicas que ya tienen su escritura y se está inscribiendo en favor del ramo de educación, eso permite que los centros escolares sean atendidos de forma pronta, no solo en reparaciones menores, sino también en la línea de cooperación internacional y la inversión que denominamos Centros
Escolares Integrales”, aseguró el funcionario.
Castaneda agregó que también se destinó un millón de dólares para
reparar daños en centros escolares afectados por fenómenos climatológicos. Los centros escolares están en la zona costera, cercanos a ríos y zona montañosa.
Los principales daños son en muros perimetrales, techos, paredes, servicios sanitarios, pisos, pozos. Con los trabajos se prevé beneficiar a 73 mil 969 estudiantes y dos mil 811 docentes de 243 centros escolares.
En otros temas, el viceministro de Educación indicó que el 2018 se cerró con una de las tasas de deserción escolar más baja de Iberoamérica. “Estamos cerrando con el 0.9 % de deserción que equivale a un cercano de 12 mil estudiantes, de esos, alrededor de 8 mil 500 eran del sector público y 3 mil 500 del sector privado. Es mucho más baja que la del año anterior”.