@davidmar2105
Javier Guillen cursa el primer año de bachillerato a distancia. Lo aprendido en este año lo fue evaluado por el Ministerio de Educación (MINED) con la Prueba de Certificación de Competencias o mejor conocida como Prueba Externa.
Su situación para cursar de una forma “normal” este grado de educación no es muy buena, debido a la situación de violencia que vive en su lugar de residencia.
Por ello, cuando se dio cuenta que esta modalidad en una universidad privada y su deseo de seguir estudiando le movió a consultar y fue como comenzó a estudiar el bachillerato, el cual dice lo terminará como de lugar.
Esta es la situación de 6 mil 833 alumnos de la zona central del país, que también se sometieron a la prueba que examina a estudiantes que cursan desde el séptimo a primer año de bachillerato, y que por motivos varios han tenido que cursar las diferentes modalidades que el MINED pone a disposición. Dicho examen consta de 25 ítems de las cuatro materias básicas y tiene una ponderación del 20 por ciento y sirve además para evaluar la pedagogía con los que los maestros de las modalidades flexibles tienen para impartir sus clases.
“Con esto queremos evaluar los indicadores de logro de cada grado y con esto también nos deja ver el desempeño de los docentes. Esta es similar a la PAES y esperamos ver como estamos con la calidad educativa y esperamos superar la nota, especialmente en las asignaturas de matemáticas y ciencias, las cuales nos ayudaran a buscar mejores metodologías para tener una mejor educación”, indicó Gloria Evelyn Hernández gerente de modalidades flexibles del MINED.
Y es que este tipo de educación requiere de metodologías de trabajo para los docentes, pues debido a que la mayoría estudiantes llegan de contextos vulnerables y han estado un buen tiempo fuera del sistema educativo.
Pero a pesar de ello, según Hernández, el MINED busca insertar a más jóvenes que no estudian ni trabajan y que su situación es vulnerable, esto con el objetivo de cumplir uno de los pilares fundamentales para el gobierno presidido por el profesor, Salvador Sánchez Cerén. En este sentido, de los más de 6 mil estudiantes que hicieron la prueba, 2 mil 796 son de la modalidad semi presencial, 1 mil 711 de distancia; 2 mil 154 de nocturna y 172 de bachillerato virtual, algo que requiere de más personal preparado para impartir las clases Silvia López, maestra que imparte uno de los cursos, dice que ellos están preparados para hacerle frente a este tipo de modalidades, aunque hizo la observación de los maestros que imparten la modalidad presencial para que los alumnos no vayan tan deficientes a la educación superior.
“Tenemos varias dificultades con los contenidos que tuvieron que aprender en los primeros grados, ya ahí se nos dificulta porque nosotros tratamos de dar el contenido que corresponde y el contenido deficitario y es así como tratamos la manera de ver que estrategia aplicar para dar una educación de calidad”, explicó López.
Esfuerzo que es agradecido por los alumnos como Javier Guillén, quien asegura que todo se aprende si el alumno también asegura que todo se aprende si el alumno le pone interés, por ello dice sentirse confiado en que saldrá bien evaluado en la prueba.