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@joakinSalazar
Con el lema “El pastor debe estar donde está el sufrimiento”, cure la Fundación Monseñor Romero, pills realiza diferentes conferencias durante la semana previa a la conmemoración de los 34 años del asesinato del arzobispo mártir, monseñor Oscar Arnulfo Romero.
Se espera que miles de salvadoreños visiten la cripta de monseñor Romero, en Catedral Metropolitana, al conmemorar, el próximo 24 de marzo el martirio del pastor que para la inmensa mayoría fue “la voz de los sin voz”, dijeron representantes de la Fundación.
El objetivo principal de estos eventos es que se reconozca la obra y la labor que realizó Monseñor Romero durante tres años, en el Arzobispado de San Salvador, como hombre de Dios, dedicado a las necesidades del pueblo más vulnerable.
El Padre Carlos Mejía recordó a los asistentes las razones del por qué Monseñor Romero es un profeta enviado por Dios para el pueblo salvadoreño, y su obra fue manifiesta cada día de su vida.
“Monseñor Romero anunció a Dios, condenó la maldad y el pecado, finalmente el profeta consuela, anima al que sufre y que padece, es lo que hicieron los profetas, es lo que hizo Jesús pero es también lo que hace Romero”, expresó el padre Mejía.
Asimismo, agregó que Monseñor Romero es reconocido como un profeta del pueblo, porque cumplió con la misión encomendada por Dios en la tierra, esto, a través de dar a conocer la palabra de Dios a quienes más necesitaban escuchar su voz.
Monseñor era reconocido por denunciar las injusticias cometidas por el gobierno en funciones, fuerza armada y combatientes del FMLN, “denuncia por igual a los ricos injustos que no tienen la sensibilidad ni son capaces de compadecer a los más necesitados”, acotó Mejía.
La labor profética de monseñor Romero no se quedó simplemente en hablar de Dios y denunciar las injusticias, sino también consoló a un pueblo necesitado, un pueblo que vivía en grandes conflictos sociales, como la represión y los aires de conflicto armado que iniciaba durante los años previos a los 80´s. “Monseñor Romero era un profeta porque anunciaba el pecado y la injusticia hacia los más pobres, la verdad que él fue la voz de los sin voz, un profeta y un mártir”, comentó Lilian de Alvarado, asistente a las ponencias sobre “San Romero de América”.
Asimismo, agregó la importancia de que se reconozca la obra de monseñor Romero, dado que en muchos países del mundo si la conocen, sin embargo, en El Salvador las nuevas generaciones desconocen las enseñanzas del Obispo Mártir, lo cual debe ser incluido en las escuelas.
De Alvarado admite la importante labor del gobierno de Mauricio Funes, dado que como presidente dio un lugar privilegiado a Monseñor Oscar Arnulfo Romero con esmero, para que las nuevas generaciones conozcan su obra.
La Fundación continuará las conferencias durante la semana, y abordarán temas que identifiquen la obra de Monseñor Romero, y el fin de semana se hará la Peregrinación de la Luz, desde monumento Salvador del Mundo hasta Catedral Metropolitana, donde se efectuará una vigilia en honor al obispo mártir.
