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En vísperas del conmemorar el natalicio del Beato Monseñor Oscar Arnulfo Romero, este próximo lunes 15 de agosto, la Vicaría del área metropolitana ha programado actividades entre las siete parroquias que conforman la Arquidiócesis de San Salvador, explicó Alfonso Guzmán, Párroco de la Iglesia El Calvario.
“Las parroquias El Calvario, Perpetuo Socorro, Basílica de El Sagrado Corazón, La Merced, San Francisco, El Rosario y Catedral Metropolitana, integran la Vicaría del Divino Salvador del Mundo. Nos reunimos cada mes para programar actividades colectivas como la que hicimos con la Beatificación de Monseñor Romero”, indicó.
Monseñor Oscar Arnulfo Romero y Galdámez nació el 15 de agosto de 1917, en Ciudad Barrios, departamento de San Miguel procedente de un hogar humilde. Luego de concluir sus estudios básicos buscó el destino de su vida, que lo llevó primero a ser un aprendiz de carpintero y a practicar la música, pero, a los 13 años de edad ingresa al Seminario Menor en San Miguel; y fue en 1937 que viajó a Roma, Italia, para terminar sus estudios teológicos en la Universidad Gregoriana el 4 de abril de 1942.
Sobre las actividades en honor a Monseñor Romero -el Padre Guzmán- señaló que siendo 2016, el año de la “Misericordia”, iban a iniciar las actividades para preparar el “Año Jubilar del Centenario del Nacimiento de Monseñor Romero” desde el 15 de agosto.
La peregrinación de la feligresía, procedentes de las siete parroquias que conforman la Vicaría del Divino Salvador del Mundo, culminará con una Eucaristía a las diez de la mañana en Catedral Metropolitana.
“Queremos invitar al pueblo a tener esa devoción, a fomentar el amor a nuestro Obispo Mártir que con la figura de él -Dios pasó acompañando al pueblo salvadoreño- en la época de la guerra y la palabra de Monseñor Romero está Viva porque es el Evangelio de Jesús, que él (Beato Romero) proclamó, anunció y vivió junto al pueblo salvadoreño”, expresó.
En cuanto al pensamiento del Beato Monseñor Romero, reiteró la importancia de leer y analizar el fondo de sus homilías y evangelios en su época de Pastor que muestran su compromiso con el pueblo salvadoreño, que demanda un compromiso incondicional con los más desvalidos.
“Monseñor Romero tiene un pensamiento que es vigente con la actualidad, si se estudian sus Homilías ahí se puede verificar que sus meditaciones están totalmente apegadas al Evangelio de Jesús y del magisterio de la Iglesia que hablar de la construcción del Reino de Dios -habló- también de compartir, de no excluir y todos y todas somos iguales ante Dios”, enfatizó.
“Conviértanse, Reconcíliense, Ámense” fueron palabras del Profeta Mártir que recoge un afiche de celebraciones de Monseñor Romero y que el Padre Guzmán consideró un reto para la vida de los salvadoreños.
“El primer revolucionario fue Jesús, que vino revolucionar la vida de las castas religiosas, los sumos sacerdotes, fariseos, escribas, que no entendían a Jesús porque él era muy exigente en el Evangelio y Monseñor Romero se metió en esta enseñanza de Jesús para acompañar a su pueblo”, puntualizó.