@SilviaCoLatino
“A Monseñor Romero le preocuparía esta situación de polarización, más cuando unos partidos políticos ven sus intereses, antes que la población”, dijo el Padre Mario Romero, de la Parroquia Nuestra Señora de la Encarnación en Lourdes, en la Santa Misa de la Comunidad de la Cripta de Catedral.
“No se pueden tomar acuerdos de nación si los partidos políticos solo ven sus bienes particulares de sus partidos, si Monseñor Romero viviera les diría que busquen más el diálogo con Dios y entre ellos, por el bien del país”, afirmó.
Retomando el Evangelio donde Jesús pidió “orar sin desanimarse” recordó a Monseñor Romero que haciendo uso del conocimiento que tenía sobre la situación que pasaba la gente cortadora de café, algodón y caña azúcar, sitúa la perspectiva de la justicia.
“Jesús utilizó la figura de una viuda que insiste ante el juez que imparta justicia, pero no le hace caso, pero ante la insistencia de ella, al final termina tomando el caso, y efectivamente el juez imparte justicia. Y eso es, lo que nos pidió Monseñor Romero a ser insistentes y dialogar, por ahora tenemos un presupuesto estancado, tenemos un salario mínimo estancados. ¿Será que somos inaccesibles para dialogar los temas de país?”, cuestionó.
Para el clérigo existen muchos temas de país que ameritan un diálogo urgente, para el beneficio equitativo de la población que se encuentra en condiciones de vulnerabilidad, por un sistema económico que genera la exclusión social y la migración.
“Este sistema ha generado crisis en el tema de las pensiones, crisis en el salario mínimo, crisis en los bonos y el pago de los escalafones, que es una crisis que no la ha generado el gobierno de turno, sino el sistema económico que genera el desequilibrio, pero tenemos el reto del diálogo, que es la enseñanza del Evangelio y la enseñanza de Monseñor Oscar Romero”, predicó.
En cuanto a las sentencias de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, frente a las finanzas del órgano Ejecutivo, el Padre Romero aconsejó a los magistrados a velar por los intereses del país, antes que sectoriales.
“Hay entidades que llaman asistencialismo o despilfarro, la inversión social, pero el Estado necesita invertir, porque ningún país sale adelante sino se invierte en educación, salud y la seguridad que son prioridades para las mayorías, que no puede ser postergada porque son muchas las personas que dependen de estos programas para darl un mejor futuro a las nuevas generaciones”, indicó.