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“Es malo roba”, cialis así lo aseguró Camila Eloísa Martínez, generic de siete años, mientras se entretenía tocando un tambor, en las afueras de la casa del ex presidente Francisco Flores, acusado de haber desaparecido 70 millones de dólares, donados por el gobierno de Taiwán para proyectos sociales.
Flores, quien actualmente guarda arresto domiciliario y es acusado de peculado, enriquecimiento ilícito y desobediencia habría recibido el dinero durante su gobierno, de parte del presidente de Taiwán quien fue juzgado en su país y paga una condena.
Camila llegó a la protesta, junto a sus familiares, la actividad consistió en una “tamaleada” que realizó el movimiento conformado por las organizaciones juveniles, ecuménicas y de la sociedad civil de El Salvador, junto a sus familiares.
El tamal, que se repartió a los asistentes, es un alimento producto del maíz, de origen indígena, pero la palabra también tiene la connotación de robo. Así, por ejemplo, si a alguien le dice “tamal” es lo mismo que decirle ladrón.
Para esta niña Flores debe devolver lo robado, esta demanda se suma a otras que realizaron durante la protesta los jóvenes, en la que se repartieron tamales a los que pasaban por el lugar. Además, de que hubo teatro y consignas, de que el mandatario debe estar en Mariona y no en su residencia en el boulevard el Hipódromo, colonia San Benito, una de las exclusivas zonas del país.
La actividad se desarrolló con normalidad, vigilada muy de cerca por unos 20 agentes de la PNC y de la Unidad del Mantenimiento del Orden (UMO). En declaraciones dadas por el mismo Flores a diputados que conforman una comisión especial de investigación, aceptó haber entregado el dinero en “saquitos” a depositarios, de los cuales no se saben los nombres.
Luego por cuatro mese se mantuvo prófugo de la justicia y la semana pasada se presentó al tribunal primero de instrucción aduciendo que quiere tener un juicio justo, pero contrario a lo que le puede pasar a un salvadoreño que se roba una gallina o un celular y que va directo a la cárcel, Flores guarda prisión domiciliar en su lujosa casa.
Ramiro Navas, del movimiento Ahora, dijo que esta acción muestra la indignación de los jóvenes por la resolución del juez Levis Italmir Orellana, de mandar a Flores a su casa y no al penal la Esperanza, en Mariona.
“El objetivo de la protesta es dejar en claro que se ha cometido una injusticia, ya que aquí un salvadoreño común y corriente se roba unos jocotes y va preso”, afirmó.
Y agregó que están pidiendo que cualquier ex funcionario involucrado en actos de corrupción debe cumplir un proceso judicial y apegarse a las leyes.
Marielos Handal, de 24 años, es una joven estudiante de sociología, de la UES, participó de la acción en la que los jóvenes deben dar el ejemplo de lucha, ya que para los adultos el tema pasa desapercibido.
¨No queremos más impunidad, ni que vuelvan las políticas de beneficiar a los de cuello blanco con su malversación de fondos¨, agregó la estudiante.
Otras demandas de la protesta es que Flores devuelva el dinero, que el Fiscal General de la República renuncie, ya que trabajó para Flores, que el juez Italmir Orellana se le castigue por sus resoluciones donde ha dejado libre a narcotraficantes y que ARENA no siga manipulando y desinformando sobre el caso.
Los tamales que se repartieron en esta protesta fueron donados para la causa y la actividad duró unas tres horas aproximadamente, a eso de las siete y media de la noche se retiraron del lugar en espera de que sus demandas sean escuchadas.
Mientras que las palabras de Camila no tienen eco en la postura de Flores que afirma no ha robado los millones de dólares.