Oscar López
@OscarCoLatino
Miembros de la Red de Solidaridad Operación y Misión Milagro exigieron al presidente de la República, Nayib Bukele hacer las gestiones pertinentes para el regreso de la brigada médica cubana que realizaba procedimientos quirúrgicos para tratar padecimientos oculares.
“Mientras el gobierno no autorice, ellos (médicos cubanos) no van a venir. Este problema se inició en la transición entre el gobierno del FMLN y el de Nayib Bukele; cuando era gobierno del Frente no hubo ningún problema”, declaró Samuel Ramírez parte de la conducción de la Red de Solidaridad.
La Red de Solidaridad mencionó que antes de que se habilitaran los quirófanos en el Hospital Nacional Santa Gertrudis, del departamento de San Vicente los pacientes debían ser llevados a Cuba o Venezuela para ser operados, lo que incrementaba el costo del tratamiento, por ende disminuía el número de beneficiarios.
Mientras funcionó el centro oftalmológico en el Hospital Nacional de San Vicente, se operaba a un promedio de sesenta pacientes diarios, lo que anualmente totalizaba siete mil quinientos beneficiados. Desde la retirada de la brigada de médicos cubanos, hay unas novecientas personas que esperan por su operación oftalmológica.
El costo de las cirugías por cataratas o pterigión se estima entre los $800 a $1,200 por ojo, lo que hace que para familias de escasos recursos, dicho procedimiento sea inaccesible. “Una persona pobre debe quedarse ciega, porque no tiene los recursos o deben de hipotecar su casa o endeudarse para recuperar la vista”, afirmó Ramírez.
De igual forma, la Red de Solidaridad pidió a la Fiscalía General de la República (FGR) que no persiga judicialmente a los médicos de la isla por ejercer su profesión en el país. “Estamos recolectando firmas para pedirle al fiscal que archive ese aviso; si la brigada médica cubana regresa, que no se les vaya a perseguir; porque aunque el convenio esté firmado por el gobierno, los perseguirán y se tendrán que ir”, dijo Ramírez.
Eduardo Sánchez médico de la Red de Solidaridad aseguró que los dos quirófanos habilitados en el Hospital Nacional Santa Gertrudis, equipados con instrumental oftalmológico valorado en más de un millón de dólares, “están cerrados y el pueblo ciego”.