Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
“La destrucción de monumentos a la paz no van a destruir nuestra conciencia. Nosotros y nosotras somos memoria viva de las luchas del pueblo salvadoreño, y por la construcción de una patria libre, justa, democrática que quiere la paz”, dijo Marisela Ramírez, integrante del Bloque de Resistencias y Rebeldía Popular (BRP), una de las organizaciones del movimiento popular que han convocado a una marcha para el próximo domingo.
Desde la primera “Gran Marcha por la Libertad”, en septiembre de 2022, que desarrollaron organizaciones no gubernamentales, sindicatos y movimientos populares, se ha mantenido la constante de protestas y señalamientos contra las injusticias cometidas por el régimen de excepción y otras violaciones a los derechos humanos de la población.
El movimiento popular invitó a la sociedad civil organizada, sindicatos, gremios y población en general a acompañar una nueva marcha este próximo domingo 14 de enero, a las 8 de la mañana, en el parque Cuscatlán, para conmemorar la fecha histórica de la firma de los Acuerdos de Paz, que puso fin al conflicto armado interno de la década de los años ochenta en el país.
“Con la firma de estos Acuerdos de Paz, el pueblo derrotó a una dictadura militar y se abrió el proceso hacia la democracia. La dictadura militar marcó sin lugar a dudas una época aberrante en la historia de nuestro país, y es por esto que con esta marcha reiteramos el mensaje que dictaduras militares nunca más”, dijo.
“Es por esto que marchamos, porque creemos que hay toda una estrategia del actual gobierno de borrar o hacer ese intento de suprimir todo este proceso de lucha del pueblo que al final consolidó las bases que ahora tenemos en la construcción de la democracia y este es el momento preciso para levantar la voz”, acotó Ramírez.
Asimismo, rechazó las “acciones fraudulentas” para la reelección presidencial, y en específico el proceso que se remonta a prácticas de las dictaduras cívico militares que llevaron al conflicto armado interno durante la década de los años ochenta. “Estamos en una situación que hace muchos años ya no la vivíamos en las elecciones en El Salvador y que sólo nos recuerdan las elecciones de la dictadura militar hace 40 años, que no eran libres, no eran justas ni democráticas, o sea, un total fraude”, argumentó.
“Y anunciamos desde ya que esa imposición ilegal e inconstitucional de la candidatura de Nayib Bukele a la reelección presidencial se consuma precisamente con el régimen de excepción que suprime todas las garantías constitucionales, la persecución del movimiento popular y las reformas a las leyes para garantizar su triunfo”, reiteró Ramírez.
En cuanto al papel de las instituciones encargadas del proceso electoral, Marisela Ramírez acotó que todas estas irregularidades del proceso electoral están siendo validados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), que calificó de “sumiso al gobierno”, así como otras instituciones que están respondiendo a la lógica presidencial de desmontar las conquistas del pueblo salvadoreño.
“Tenemos a la Fiscalía y la Corte Suprema de Justicia que han validado y permitido este proceso fraudulento, junto a un abuso excesivo de los recursos del Estado para hacer campaña electoral y una instrumentalización de la Fuerza Armada y la Policía Nacional Civil, para amedrentar a la población”, manifestó.
“En este contexto reafirmamos como Bloque de Resistencia y Rebeldía Popular y las otras organizaciones que nos encontramos acá, que marcharemos también por la exigencia de un mejor salario mínimo frente al alto costo de la vida que golpea a los sectores más vulnerables de nuestro pueblo y otras demandas sociales”, reafirmó Ramírez.
Sobre las personas inocentes que fueron capturadas en el marco del régimen de excepción, Samuel Ramírez, del Movimiento de Víctimas del Régimen (MOVIR), invitó a la población y familiares de las víctimas a la marcha para reivindicar los derechos de las personas que aún guardan prisión.
“Marchemos contra el régimen actual y mostremos ese apoyo a la paz, a la reconciliación y el repudio a este gobierno por estar dedicando tiempo y recursos para destruir símbolos de paz, que ayudaron mucho, en la democratización de este país”, manifestó.
“Y también marchemos para crear conciencia en la población que no es con violencia que se resuelven los problemas y que el régimen está generando condiciones para un conflicto social a futuro. Hacemos el llamado a las víctimas a participar, sabemos que muchas de ellas tienen miedo porque el régimen está vigente y siempre está pendiente de hacer capturas arbitrarias”, expresó Samuel Ramírez.
Mientras, Patrocinio Dubón, excombatiente y miembro del Movimiento de Defensa de la Tierra (MDT), llamó a todos los sectores sociales a pronunciarse públicamente contra el “régimen del actual gobierno”, al señalar que la población cuenta con derechos como la libertad de expresión para denunciar sin temor las arbitrariedades contra la población.
“Salgamos a la calle como lo hicimos en los años ochenta, donde hombres y mujeres valientes, nos opusimos a una maquinaria gubernamental, que no sólo contaba con el apoyo nacional, sino que tenía el apoyo del gobierno estadounidense durante el conflicto, y los Acuerdos de Paz, deben seguir siendo una conquista colectiva del pueblo salvadoreño”, señaló Dubón.
Por el Movimiento de Trabajadores Despedidos (MOT), Salomón Alfaro, convocó trabajadores, sindicatos, gremiales y despedidos gubernamentales y municipales mediante un proceso ilegal y arbitrario, a participar en la marcha para exigir la normativa y seguridad laboral legislada en la Constitución y Código de Trabajo del país.
“Los estamos convocando a esta marcha porque debemos denunciar los grandes atropellos contra la clase trabajadora, la destrucción de la estructura sindical, la persecución de líderes sindicales, sus capturas y encarcelamiento de estos compañeros y compañeras que defienden derechos laborales y sindicales”, indicó.
“Si marchamos este 14 de enero, es porque hay tremendos retrocesos democráticos en el país, también para defender los derechos y libertades como la de libre expresión, la de participación social y la de asociación de la que puede hacer uso la población”, reiteró Alfaro.
Por el Movimiento Universitario Pensamiento Crítico (MUPC), Rafael Paz Narvaez recordó que se está viviendo un “ataque histórico contra la lucha popular “ que el pueblo emprendió desde el Siglo XX, y una estratégica “represión” contra las capacidades del pueblo salvadoreño de organizarse.
“Se están desmontando todos los logros de la lucha popular, democrática y revolucionaria (70 -80), se están cerrando los espacios políticos como las alcaldías, el fraude electoral en curso -que hemos denunciado- y que es visible ya desde los primeros resultados del voto del exterior en donde se han identificado una serie de incoherencias e incongruencias que se agrava por la falta de contraloría social y organizada sobre esto que está ocurriendo”, observó Narvaez.
El Bloque de Resistencias y Rebeldía Popular, y los movimientos populares reiteraron, que desde el anuncio de la reelección del presidente Nayib Bukele han considerado que el segundo mandato consecutivo será un gobierno de “facto” (sin reconocimiento jurídico).
“Esto sería ilegal, fraudulento porque así está estipulado en la Constitución, por un lado, y también porque el gobierno ha manipulado las leyes no sólo para garantizar su triunfo a la presidencia, sino también para controlar descaradamente a la Asamblea Legislativa a través de las reformas que le dan ventajas a él. Por esto no lo reconocemos”, puntualizó Marisela Ramírez.