Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
Movimientos populares y sindicatos se tomaron las calles de San Salvador, pese a los intentos de sabotaje de parte del Gobierno, en defensa del escalafón de los ministerios de Salud y Educación , luego que estas Carteras de Estado sufrieran los mayores recortes del Presupuesto General, para el año 2025.
Héctor Rodríguez, del Movimiento de Trabajadores Despedidos (MTD), afirmó que las y los trabajadores salvadoreños se encuentran ya en una situación precaria de vida y que con los recortes del escalafón se elevaría esta “crisis económica” .
“Le decimos a este régimen de gobierno inconstitucional de Nayib Bukele, que retroceda con este Presupuesto, que es ilegal. La clase trabajadora salimos hoy a marchar y denunciar este presupuesto y advertirles a todos los funcionarios públicos que no están sobre la ley”, reiteró Rodríguez.
Mientras, Morena Murillo, directora ejecutiva del Foro Nacional de Salud, afirmó, que marchaban por la coyuntura que ha generado el proyecto de Presupuesto General, tras alegar que las suspensiones de incrementos y nivelaciones salariales, así como la prohibición de nuevas plazas, la afecta la “congelación” de los escalafones de salud y educación.
“Aquí se esconde una serie de violaciones a los derechos laborales de la clase trabajadora y a la población en general, que coinciden con las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional como eliminar de facto los escalafones de salud y educación; suprimir 11 mil plazas de la mayoría de instituciones públicas y desaparición de otras instituciones públicas”, argumentó Murillo.
Las trabajadoras y trabajadores realizaron un llamado al presidente Nayib Bukele, a buscar “soluciones consensuadas a la problemática social existente. Y como movimiento por la defensa de los derechos de la clase trabajadora estaban preparados para el “diálogo” y encontrar espacios de coincidencia en común.
En esta marcha participarían todas las organizaciones de Salud y Educación, pero, a últimas horas del viernes, el Gobierno reunió a varios dirigentes magisteriales para una reunión, con el propósito de no realizar la marcha, y los dirigentes así lo hicieron, menos el Frente Magisterial, que acusó a sus colegas de haber sido «comprados».
Mientras, en el área de salud, el gobierno obligó a que la mayoría de empleados, sobre todo médicos y enfermeras trabajaran este sábado.