A primeras horas de este 24 de marzo se conoció la triste noticia de la muerte del padre belga-salvadoreño Rogelio Ponseele. Según informes, Ponseele falleció de un paro cardíaco.
La semana pasada el sacerdote, muy querido en el nororiente del país desde la guerra civil, sufrió un accidente de tránsito cuando se dirigía a oficiar una misa a Los Quebrachos, en Perquín, Morazán.
Ponseele vino a El Salvador en 1970, durante toda su vida acompañó a las comunidades en sus luchas y predicó el evangelio con valor y esperanza de una sociedad más justa. Gran parte de su trabajo lo desarrolló en la colonia Zacamil, donde los escuadrones de la muerte lo tenían en la mira, y por eso, a a principios de los 80 se trasladó a Morazán, donde acompañó a la población en los territorios controlados por la guerrilla.