Bangkok / AFP
A tres meses de la COP24 en Polonia, una sesión intermedia de negociaciones sobre el clima se inauguró este martes en Bangkok para reimpulsar el acuerdo de París, marcado por una manifestación que critica la responsabilidad de los «países ricos», especialmente de Washington.
«Nosotros organizamos esta sesión en Bangkok porque no estamos avanzamos tan rápido como podríamos», dijo el polaco Michal Kurtyka, presidente de la vigésimo cuarta Conferencia de las Partes sobre el cambio climático (COP24), auspiciada por la ONU.
En su discurso inaugural hizo hincapié en las señales de recalentamiento del planeta.
«Todos sabemos que el tiempo se está acabando» y que «la credibilidad del proceso está en la balanza», agregó en momentos que los delegados tienen que avanzar sobre reglas detalladas de aplicación del acuerdo de París o de lo contrario quedará en letra muerta.
Los 190 países participantes tienen hasta final de este año, y la 24ª Conferencia sobre el Clima de la ONU en diciembre en Katowice, para finalizar las reglas de implementación del pacto de 2015, que pretende reducir el calentamiento mundial por debajo de los 2ºC, incluso de los 1,5º C, con respecto a la era preindustrial.
Pero las tensiones que han surgido entre los países han llevado a la parálisis este verano boreal del Fondo Verde sobre el Clima de la ONU, ya afectado por la suspensión de la ayuda de Estados Unidos decidido por el presidente Donald Trump.
Activistas ecologistas manifestaron el martes ante el edificio donde se sostenía la reunión, para subrayar el hecho de que «los países ricos, en primera fila Estados Unidos, son ampliamente responsables» del cambio climático, pero «evaden sus responsabilidades». El acuerdo prevé una ayuda anual de 100.000 millones de dólares hasta 2020 para los países pobres.
«Estamos trabajando contra reloj… Pongámonos a trabajar con el sentido de urgencia que exige la situación», insistió de su lado la mexicana Patricia Espinosa, secretaria ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CCNUCC).
El gran desafío de los negociadores en Bangkok y en Katowice es que los países aumenten sus compromisos de reducción de las emisiones de efecto invernadero.
Los compromisos actuales harían que la temperatura promedio mundial aumente más de 3°C en relación a la era preindustrial. Hasta ahora el termómetro ha aumentado 1°C.