Ante una aplastante derrota como la sufrida por el partido FMLN el domingo 4 de marzo en las elecciones para alcaldes y diputados, los pesimistas pensarán que es el fin del principal partido de izquierda. Pero no, no es así.
Claro, el partido tiene mucho trabajo que hacer para recuperar a ese votante de izquierda, para atraerlo a las urnas, pues en marzo del otro año se viene otra elección importante.
No hay duda que parte del electorado de izquierda no acudió a las urnas, pero no lo hizo para que el partido de ultraderecha ganara, sino para mandarle un mensaje fuerte a la dirección del partido, en primer lugar, y al gobierno, en segundo lugar.
Qué bien que la dirección del partido así lo ha entendido, y qué bien que ya anunció que hará las “correcciones” necesarias. Así lo expresa uno de los párrafos de un comunicado oficial calzado por la Comisión Política del FMLN, y que fuera leído por el secretario general del FMLN Medardo González.
“…El mensaje expresado por la ciudadanía a los partidos y al FMLN este 4 de marzo será objeto de reflexión responsable y profunda, que permita ir al encuentro de las lecciones aprendidas, para tomar decisiones y corregir lo que sea necesario”, dice textualmente el comunicado.
Esas correcciones tiene que conocerlas toda la militancia, todos los simpatizantes y todos los que históricamente han votado por el FMLN, sobre todo los que se abstuvieron de ir el domingo 4 de marzo a las urnas.
Los militantes, simpatizantes y votantes del FMLN deben tener claro también que la evaluación crítica debe ser fraterna, responsable, pensando ante todo en la unidad del partido.
Y como nos compartió un amigo, tampoco “es tiempo de reclamos destructivos y divisivos”.
El análisis de lo ocurrido debe hacerse seria, profunda y sobre todo, de forma responsable. Porque hay que buscar las causas de lo ocurrido, no responsables, y sobre todo, correcciones más que castigos. Así sea.